Mobiliario Urbano
Segarra también está interesada en el contextode los centros históricos, de tal forma que el libro es una coincidencia de la historia del diseño industrial y la protección del patrimonio.
“En el tema de la conservación de centros históricosparecía como que el mobiliario urbano siempre estaba a un lado, se hablaba mucho de conservación, pero a la hora de elegir el mobiliario siempre se hacía al azar, por motivos de coste u otramotivación, nunca estudiado muy a conciencia”, afirma.
Si bien en ciudades antiguas como Roma o Pompeya ya existía cierta preocupación por ese ámbito del espacio público, la especialista explica que lahistoria del mobiliario urbano “no es más antigua de finales del siglo XVIII. La preocupación por el espacio público surge en el Renacimiento y se sistematiza como una inquietud de los ayuntamientos en elSiglo de las Luces, en la Ilustración, que es cuando se hacen las grande obras públicas, los levantamientos catastrales, el empedrado de las calles, etcétera”.
Podría suponerse que aquella inquietudsólo era de las grandes ciudades europeas, pero Segarra afirma que “sucede en todo el mundo y por supuesto también en México”. Elementos como el zompantli o incensarios aztecas permiten rastrear losprimeros ejemplos de elementos urbanos en territorio mexicano y tras la Conquista “se establecen una serie de elementos que se copian de las ciudades renacentistas europeas”.
Pero será sobre todo apartir del siglo XVIII, en coincidencia con la Ilustración, cuando surge un interés pleno por el tema. “Se empiezan a emitir las primeras normas para evitar los incendios, eso conlleva las...
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