no sé

Fue una noche tranquila como de contumbre, la música sonaba de fondo pero el sonido de las luciernagas la opacaban.
Al parecer esperaba a alguien, pero esta noche no vendría y él lo sabía, sinembargo dormir no era una opción, no para un ser como él que podría saltar a la siguiente noche pero desperdiciar un poco de tiempo le parecia más interesante, que privilegio.
los monstruos leadministrarían psicotropicos más potentes por la mañana, Almendra había vuelto a perder el control y esto no debía volver a suceder. Estaba confundida y con una punzada en el pecho, la cual interpretaba comola necesidad de alguien que no recordaba bien, pero eso no importaba por que él podía trasformarse en lo que sus caprichos dispusieran.
Tratar de entender era complicado, los recuerdos se le volviannebulosos y los rostros tan palidos y desahuciados mirandola como una inadaptada le hacian dificil concentrarse, por suerte sobrevino un torbellino de infomación, su memoria estaba reestablesida, losodiaba, oh pero fue demasiado tarde, su cerebro volvia a apagarse.
Se paso la mañana entera idolatrandola, él lo hacía mejor que nadie, no cabian dudas era perfecto y almendra lo sabía, la felicidadla desbordaba, solo podía pensar que se trataba de amor.
Los días eran felices uno tras otro y comenzaba a inquitarle lo sublime que era él, tenía todo lo que necesitaba, todo lo que deseaba, todolo que se imaginaba! definitivamente algo anba mal. Comenzo a analizar cada uno de sus gestos y cada vez le aterrorizaba más su complacencia, como si él se introduciera en su mente para saber lo quedeseaba, espantoso penso mientras lo miraba y en el mismo instante su siluta comenzo a cambiar de color se transformaba, o trataba por que él solo podía ser lo que ella quería que él fuera. No alcanzo agritar cuando otra vez todo se volvía negro.













Estaban tan felices, siempre era primavera, los arboles brillaban, y la música, la música siempre de fondo, pero que...