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Día 11 de junio
P. Juan Croisset, S.J.
San Bernabé fue judío de la tribu de Leví, y nació en Chipre, donde había mucho tiempo que se había establecido su familia; llamóse José ó Joseph hasta después de la ascensión del Salvador, que los Apóstoles le dieron el nombre de Bernabé, que quiere decir hijo de consolación, por el don particular que le había dado Diospara consolar á los afligidos, teniendo especial gracia para endulzar las pesadumbres y tranquilizar los corazones. En todo era muy grato, dice San Juan Crisóstomo: bella disposición, genio apacible, naturalmente liberal, recto, sincero, afable y bondadoso, de una fisonomía muy amable, de bello aire, de modales atentos y cortesanos; en fin, de tanta modestia y compostura, que desde luego sellevaba los corazones.
Su casa era muy acomodada, y así no perdonó á medio alguno para darle una buena educación. Prendados sus padres de su amabilidad , de su natural inclinación á la virtud y de los talentos que ya manifestaba para las letras, le enviaron á Jerusalén para que las aprendiese bajo el magisterio del célebre Gamaliel, con cuya ocasión conoció á Saulo, que era de su misma edad concorta diferencia, y estudiaba también con el mismo maestro. Desde entonces estrecharon los dos aquella amistad que después contribuyó no poco á la conversión de los gentiles.
Al paso que el joven José iba creciendo en edad, crecía también en juicio y en prudencia: no había mozo más virtuoso ni más asentado., Como por su tribu había nacido destinado al ministerio del templo, todo su estudio erahacerse digno de él con la pureza de las costumbres, siendo toda su ocupación y todo su entretenimiento la oración y la lección de las Santas Escrituras. Nunca se le hallaba sino en el templo, ó con los doctores de la Ley, y en todas partes era conocida y celebrada su virtud.
Hallábase Bernabé en su gran reputación cuando el Salvador del mundo se comenzó á manifestar en público con susmilagros. Hallóse presente al que hizo con el paralítico; y como suspiraba tanto por el Mesías, y no le tenían ofuscado las pasiones, conoció luego á Jesucristo; prevenido con la divina gracia, se arrojó á los pies del Salvador y le suplicó le admitiese en el número de sus discípulos; recibióle entre ellos el Señor, y colmóle de gracias con esta dichosa elección.
Admitido nuestro Santo en el número delos setenta y dos, corría las villas y las aldeas anunciando al Salvador, y autorizando con muchos milagros su predicación.
Era dueño de una posesión muy rica cerca de Jerusalén; vendióla después de la venida del Espíritu Santo, y puso todo el precio á los pies de los Apóstoles para que fuese distribuido entre los pobres. Sabiendo que su antiguo condiscípulo Saulo, movido de un falso celo,era enemigo mortal de los discípulos de Cristo, tuvo muchas conferencias con él; probóle invenciblemente la divinidad del Salvador; convencióle, pero no le convirtió, porque Jesucristo se había reservado á Sí mismo esta conquista.
Mientras Bernabé y Pablo trabajaban en la viña del Señor en Antioquia con Simón, llamado el Negro, con Lucio el de Cirene y con Manahen, hermano de leche de Herodes,á los cuales llama la Escritura profetas y doctores, los escogió Dios para apóstoles de los gentiles de un modo maravilloso. Estaban juntos un día los ministros del Señor para celebrar los divinos misterios, y el Espíritu Santo ordenó, por la boca de los profetas, que Pablo y Bernabé fuesen segregados para emplearse en el ministerio á que los tenia destinados, que era anunciar á los gentiles elEvangelio. Luego fueron consagrados por la imposición de las manos, que, elevándolos á la dignidad de apóstoles, los llenó de los dones del Espíritu Santo, y los confirió la plenitud del sacerdocio.
Recibida la misión, partió San Bernabé con San Pablo para Seleucia; desde allí pasaron á la isla de Chipre, donde dieron principio á las funciones de su apostolado; predicaron...
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