¡Odio Al Casino!

¡Odio al Casino!
Jorge J. S. 2012

Preámbulo Todo comenzó el día en el que nací, 2 de Noviembre de 1988. Tuve la suerte, por el azar del universo, de existir. Además de una familia que siempre me ha apoyado y para quien va dedicado este trabajo a manera de confesión y agradecimiento. El primer semestre perdí seis de siete materias por aprender a jugar poker. Contra todos los pronósticos yprobabilidades, pero con la firme convicción de que el arte era el camino que debía seguir, la vocación a la que me quería entregar en cuerpo y alma. Estoy hoy aquí escribiendo esta historia como la conclusión de una etapa de mi vida. El proyecto implica una superación personal. La disciplina del juego controlado y de reducción de riesgos y daños. La liberación (desahogo) de mi adicción por medio delas artes plásticas. Es mi testimonio, una historia que deseo contar al mundo para aliviarme. Haber estado adentro para contar la historia desde afuera. Se trata de ver los años transcurridos en retrospectiva y hacer una muestra de todas las obras realizadas a lo largo de mi carrera académica, fundida completamente con mi experiencia en los distintos casinos de la ciudad de Bogotá. Gracias a todaslas personas que me han acompañado, enseñado y jugado en contra mía.

Capítulo 1 Introducción a la autodestrucción

Nadar tanto para morir en la orilla.
Mi relación con el juego tiene orígenes sanguíneos. Mi papá es jugador, le gusta apostar en deportes, carreras de caballos y fue el que me enseñó a jugar poker desde que era un niño. Mi abuelita va todos los días a jugar bingo. En elcolegio, a la hora del almuerzo, jugaba ruleta en el casino del centro comercial que quedaba al frente, la mayoría de días no almorzaba y cuando lo hacía era en el Corral (costosa hamburguesería). El día que cumplí dieciocho años fue cuando empecé a jugar todos los días empedernidamente. No fue porque haya ganado. No fui un ludópata que quedó enganchado porque la primera vez ganó. Yo perdía y regresaba atratar desesperadamente de recuperar el dinero. Arranqué un viernes perdiendo veinte mil pesos en un casino que quedaba por la calle 100 con carrera 19, de ahí su nombre “VEGAS 100”. Fue la primera vez que aposté en la ruleta. Al otro día regresé al casino en las horas de la tarde, me senté en el mismo puesto y cambié de nuevo veinte mil pesos. Al cabo de unos minutos ya había recuperado todo eldinero y estaba a paces con el Casino, pero lastimosamente tomé una de las peores decisiones de mi vida: continúe jugando para perderlo todo otra vez. Mi desgracia había empezado. Desde aquel día fui poseído por el demonio de la ruleta. Seguí perdiendo progresivamente a lo largo de los años para llegar al punto de hacer la apuesta máxima permitida y verme totalmente sumergido en la ludopatía. Pasétanto tiempo adentro del casino que cuando me di cuenta ya se me había pasado la adolescencia y quedé totalmente solo. Perdí a todas las personas que me rodeaban y el anhelo de un reencuentro. No necesitaba ganar nada, pero sí perdí toda la energía vital y dejé de hacer muchas cosas, de conocer demasiados sitios para al final quedar con arrepentimiento y frustración por el tiempo que se me escapóde las manos. Ahora quiero vencer mi vicio. Era necesario perderme para volver a encontrarme. Me pasé esperando a que algo pasara y lo que se pasó fue mi vida.

Capítulo 2 La enfermedad

El que dice que no vuelve a jugar es el que retorna y se estrella.
La ludopatía fue la incapacidad que padecí de resistir los impulsos a jugar juegos de azar durante muchos años. Cada vez necesitaba apostarmás dinero para conseguir el mismo nivel de excitación. La adrenalina, la emoción en la sala del casino, el temblor, el sudor, el corazón que salta del pecho, son los signos de una fuerza muy difícil de contrarrestar que no llega a ser nada placentera, una tensión que toca todo el cuerpo y la mente. Era un jugador compulsivo que no podía dejar de hacerlo, utilizaba el juego como vía de escape...