pensamiento científico en lo cotidiano

SIGUIENDO EL REFRÁN: EN CASA DE HERRERO CUCHILLO DE PALO...

Luego de treinta años de docente e investigador universitario, enseñando, cultivando y difundiendo ciencia -y muchas de sus herramientas metodológicas- en el área agro-ambiental, me encuentro iniciando un ensayo de cómo aplicar el pensamiento científico en mi vida cotidiana. Todo un desafío... porque se verifica por enésimavez lo del título de este trabajo. Tanta publicación, tanto diploma, curso y discurso para ignorar los principios científicos básicos factibles a aplicar en lo más próximo e inmediato: en mi mismo.
En particular me referiré a la aplicación de conceptos y métodos científicos a la dieta1 como determinante de mi salud. Intentaré convertir mi problemático exceso de peso en un incremento de mibienestar global. Deseo rescatar para ello -desde una postura muy ecléctica- la potencialidad del pensamiento científico actual explicitando con plena conciencia sus limitaciones.
Los primeros dos apartados explicitan mi marco de referencia general para la posterior aplicación de lo científico a asuntos de la dieta. Finalizo esta introducción citando a uno de los padres del pensamiento complejo con elcuál me identifico, Edgar Morin (1997) quien expresa:
“En lo que a mi respecta, trato de asumir no sólo mi propia dialógica sapiens-demens, sino también la dialógica entre cuatro fuerzas que son muy potentes en mí, de las cuales ninguna logra dominar a las demás y de las que acepto la coexistencia, el diálogo y el conflicto. Me refiero a la duda y a la fe, la racionalidad y el misticismo.”
Mi vida y mi salud: una mirada holística de un sistema complejo

Asistimos a un cambio de paradigma en la ciencia, del reduccionismo al holismo ... de las partes al todo que es más que la simple suma de las partes. La ciencia contemporánea no descarta el análisis, la "parte" ... pero intenta ir más allá de ella, reconociendo la emergencia de nuevas realidades cuando concebimos loselementos interactuantes que constituyen las totalidades. La ciencia de la complejidad requiere de todos los aportes disciplinarios fragmentarios de la realidad, pero su visión es de síntesis y lleva a nuevos puertos insospechados.
Si profundizo en este cambio del paradigma científico, puedo incorporar todas las dimensiones del Ser. Integro aquello que está mas allá de lo explicable en términosfísicos, químicos, biológicos, psicológicos y sociológicos, es decir paso de las ciencias a la espiritualidad, de la física a la metafísica, trasciendo lo inmediato y evidente de la materia, energía e información.
De esta manera el concepto de salud adoptado va más allá incluso a aquel de la Organización Mundial de la Salud. Éste refiere a un estado de completo bienestar físico, mental y social, yno solamente la ausencia de enfermedad o dolencia. En una concepción multidimensional del Ser, no veo motivo de excluir la dimensión espiritual. En este contexto incluyente, sistémico y complejo, rescato a Osho (2002) quien asocia la salud a la unidad, a la integración y armonía interior, mientras que la división, la fragmentación o el desgarro significan enfermedad. Por otra parte, Dethlefsen yDahlke (2004) expresan el papel que juega la enfermedad:
“La enfermedad obliga al ser humano a no abandonar el camino de la unidad, por ello la enfermedad es el camino a la perfección”.
Me concibo como una unidad orgánica, polifacética y compleja. La dieta que vaya a investigar e implementar no está ajena a todos y a cada uno de los restantes componentes de mi “sistema vital”. Mi salud nodependerá exclusivamente de la dieta sino de otros factores como el sedentarismo y los vínculos personales. Y a través de la ingesta se afectarán otros planos de mi existencia, por ejemplo el económico con una distribución cuantitativa y cualitativa diferencial de mi dinero destinado a la compra de alimentos.

Conocimiento y sabiduría: las ciencias y otras fuentes

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