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Páginas: 35 (8747 palabras) Publicado: 7 de enero de 2016


2ª ÉPOCA • NÚMERO 77 • 12 DE NOVIEMBRE DE 2013
INCLUYE ÍNTEGRO EL AS COLOR NÚMERO
77 DEL 7 DE NOVIEMBRE
DE 1972










































MATADOR
UN OLVIDADO EN LA MESA DE LOS MÁS GRANDES
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SU MOMENTO MÁS MÁGICO.
Mario Alberto
Kempes lideró a la selección de Argentina que venció en 1978 el Mundial disputado en su país,
con dos goles suyos en la finalante Holanda.











NO DIGA GOL, DIGA
KEMPES
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Mario Alberto Kempes fue el adelantado a su época. Se convirtió en el traspaso más caro entre clubes argentinos; fue la venta más elevada al extranjero; el líder de la primera Argentina campeona del Mundo; el mayor escaparate internacional de la historia del Valencia.; y, sin embargo, nunca presumió por ello. Al contrario. Siempre fueaquel chaval tímido que jugaba en las calles de Bell Ville.

ICONO DEL VALENCIA.
Para la afición del Valencia está Kempes y después el resto de los mortales
que han sido futbolistas de la entidad.








DOS ‘10’ DE ARGENTINA.
Kempes y Maradona coincidieron en el espacio
tiempo, aunque
Diego explotó cuando el Matador ya estaba en el ocaso de su
carrera.



CONRADO VALLE /


Mario Alber toKempes cuesta encontrarle su si-
tio en el olimpo del fútbol. Está como en zona de nadie entre los legendarios de este deporte. Para muchos su lugar está en un esca- lón intermedio entre los Pelé, Di Stéfano, Cruyf f y Maradona y el resto de grandes de la historia de este depor te. Su alma gemela en este sentido pudiera ser Eusebio, aunque los acérrimos de ‘Marito’, como le conocían de niño, siem- prepodrán decir que a diferencia del por tugués su ídolo ganó un

La IFFHS le nombró el sexto mejor futbolista argentino del Siglo XX, un puesto quizás no se ajusta a su verdadera valía
Mundial. Alguno de sus fanáticos incluso iría más allá y diría que fue Kempes quien hizo ganar a Ar- gentina su primer Mundial, como Maradona su segundo.
Posiblemente las generacio- nes que no le vieron jugar conoz-can a otras leyendas más que a Kempes. Al menos aquellos afi- cionados que no lo son del Valen- cia Club de Fútbol, porque para la mayoría de los valencianistas no hay otro más grande en la historia del fútbol que el Matador. Sin em- bargo la IFFHS le catalogó como el sexto mejor futbolista argentino del Siglo XX. Quizás ese reconoci- miento ‘menor’ hacia su figura se deba precisamente a que en Eu-ropa solo amó al Valencia y en el ocaso de su carrera deambuló por Hércules, First Vienna, Saint Pols- ten y Kremser. Seguramente tam- bién pudiera tener algo que ver el hecho de que él nunca tuvo el ego que envuelve a los futbolistas en
general y a las estrellas, en par- ticular.
César Luis Menotti, el selec- cionador de Argentina en 1978, escribía de su puño y letra en la biografía de Kempes losiguiente: “Recuerdo que en medio de la lo- cura de los festejos me dijo: ‘Gra- cias por llamarme, César. Esto se lo debo a usted’. No podía creer que él me estuviera agradecido a mí”. Otro ejemplo de su forma de ser: el día después de ese agra- decimiento a Menotti, apenas 24 horas después de ser el autor de dos de los tres goles de Argenti- na a Holanda en el Monumental de Buenos Aires, Kempesviajaba de regreso hacia su querida Bell Ville en el coche con sus padres como quien vuelve a casa tras pa- sar unas vacaciones en la playa. Incluso a punto estuvo de dar me- dia vuelta y volverse por donde ha- bía llegado, y todo por un ataque de timidez que le entró cuando se
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UN AÑO EN RIVER PLATE.
Kempes se marchó de Valencia (aunque volvería después)
a River Plate. Allí militó unatemporada y coincidió de técnico con Di
Stéfano .

































UNA PAREJA MEDIÁTICA.
El Ramos Costa quiso construir un gran Valencia
y fichó a algunos de los mejores de la época.
Incorporó a Kempes y también a Bonhof.
























enteró que en su localidad natal le esperaban multitud de vecinos en las calles y un camión de bombe- ros a la entrada para pasearle por la...
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