Psiquiatria
Por su parte, la AII incrementa la actividad de la NAD(P)H oxidasa (fuente principal del anión superóxido en los vasos) y estimula laproducción de esa ERO en el sistema nervioso central. La infusión intracerebral del inhibidor de la NAD(P)H oxidasa bloquea el incremento de la actividad simpática renal inducida por la AII de origen central. Además, la sobreexpresión de SOD en el cerebro inhibe el efecto presor central de la AII. El losartán atenúa el flujo eferente excitatorio simpático al inhibir la síntesis de aniónsuperóxido inducida por AII.
Gao y colaboradores presentaron un estudio en el cual el ejercicio aeróbico normalizó el flujo eferente simpático y la función barorrefleja arterial en conejos con ICC inducida. El efecto beneficioso del ejercicio fue asociado con un incremento en la expresión de la SOD y una disminución de la subunidad gp91 de la NADPH oxidasa en la médula ventrolateral rostral.
En unestudio previo, el ejercicio redujo la expresión vascular de la NADPH oxidasa y de los receptores AT1, lo que resultó en una disminución local en la generación de ERO que se asoció con una mejoría en la vasodilatación coronaria mediada por acetilcolina y con una reducción de la vasoconstricción inducida por AII. Estos resultados sugieren que existe una relación entre el flujo eferente simpático y lavasodilatación dependiente del endotelio, donde el estrés oxidativo desempeña un papel importante.
La restauración de la función autonómica a través de mecanismos antioxidantes explicaría los efectos beneficiosos del ejercicio en la ICC, dado que aumenta la sensibilidad barorrefleja arterial y disminuye la actividad simpática renal en reposo en conejos con ICC.
El bloqueo de los receptoresAT1 aumenta la sensibilidad barorrefleja en conejos controles con ICC pero no en conejos entrenados. Se observó una correlación positiva entre la actividad nerviosa simpática y la AII plasmática. El ejercicio induce una expresión génica favorable en las células endoteliales, óxido nítrico sintasa y SOD extracelular, que mejoran la actividad biológica del óxido nítrico.
Wisloff y colaboradoresdemostraron que el entrenamiento de alta intensidad adicionado a la medicación estándar redujo la remodelación ventricular izquierda y mejoró la capacidad aeróbica y la calidad de vida en un grupo de pacientes con edad promedio de 75 años, luego de que presentaran un infarto. El VO2 aumentó un 46%, en comparación con el 14% en los pacientes con entrenamiento moderado de resistencia, y secorrelacionó con el coactivador-1alfa del receptor gamma activado por el proliferador de peroxisomas del músculo esquelético y con la recaptación de Ca2+ dentro del retículo sarcoplásmico. Esta mejoría se relacionó además con la dilatación mediada por el flujo de la arteria humeral. El entrenamiento a intervalos se asoció con un aumento del 15% en el estado antioxidante total, que también se correlacionó...
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