"Si los imbéciles donaran"

“Si los imbéciles volaran, estaría siempre nublado”


La palabra imbécil “se aplica a la persona que esta escaso o carece de inteligencia, que es torpe de entendimiento”1 . Si lo llevamos a un contexto familiar, generalmente, llamamos imbécil a aquella persona a la que le estamos explicando algo y no logra entenderlo sin importar cuantas veces se lo digamos, y es en ese punto en el quenos colapsa lo dura de cabeza que es y… ¡pum! Le gritamos: ¡IMBÉCIL! Claro que acompañado de un sin número de otras palabras a las cuales denominamos con el concepto de “Letra o trazo mal formado e ininteligible”2 (garabato). O en el caso de alguien con mucha paciencia, después de un largo rato de explicaciones, nos paramos (si es que se está sentado), sonreímos y nos vamos.
Sin embargo,aquella imbecilidad en la que quiero indagar, va más allá de lo meramente cognitivo, esta se relaciona con la inteligencia moral, con la ética, y con el amor propio. Y superarla es una clave para alcanzar la buena vida, esa vida soñada, la cual por supuesto no es perfecta, porque nada lo es en este mundo, pero es plena y primordialmente feliz.
En el ensayo “Ética para Amador” de FernandoSavater, dedicado a su hijo Amador (16 años) y el cual recomiendo leer (no porque lo haya leído completamente, sino porque lo que leí me quedo dando vueltas en la cabeza y haciendo ruido por días), en el capítulo “Aparece Pepito Grillo”; el imbécil es presentado como un cojo de ánimo, es decir, un debilucho de espíritu, y es estereotipado en cinco modelos: el indiferente, como diríamos los jóvenesel “fuck the system”; el indeciso, lo quiere todo y no quiere nada; el conformista, no sabe lo que quiere y tampoco lo averigua; el cómodo, sabe lo que quiere pero no tiene la voluntad para hacerlo, por lo que termina haciendo lo que no quiere; y por último tenemos al que a mí me gusta llamar “el confundido”, es aquel que toma malas elecciones, jura saber lo que quiere y lucha fuertemente porconseguirlo, pero la verdad es que aquello por lo que lucha lo está destruyendo.




De todos los imbéciles, este último es el menos desafortunado, y es el más prospero a salvarse, ya que el lucha por algo, que cree querer, ferozmente, por lo que cuando encuentre lo que realmente quiere se enfrentara con la misma o más potencia para conseguirlo.
También postula que la cura dela imbecilidad es el “tener conciencia” (aparece pepito grillo), pero no una conciencia cualquiera, sino una egoísta(¡ya entenderás!); indicándola como una habilidad, refiriéndose a que hay personas que nacen con un talento moral, pero que también al ser una habilidad, es además adquirible y se puede tanto desarrollar como atrofiar según quien la posea y el uso que haga de esta. Las claves paraposeer un grillo propio consisten fundamentalmente en:
“a) Saber que no todo da igual porque queremos realmente vivir y además vivir bien, humanamente bien. b) Estar dispuestos a fijarnos en si lo que hacemos corresponde a lo que de veras queremos o no. c) A base de práctica, ir desarrollando el buen gusto moral, de tal modo que haya ciertas cosas que nos repugne espontáneamente hacer(por ejemplo, que le dé a uno «asco» mentir como nos da asco por lo general mear en la sopera de la que vamos a servirnos de inmediato). d) Renunciar a buscar coartadas que disimulen que somos libres y por tanto razonablemente responsables de las consecuencias de nuestros actos.”
Te preguntaras, ¿Cómo se vive humanamente? ¿Qué es lo que realmente queremos? Pues para vivir humanamente hayque hacer lo que queremos; que es hacer todo aquello que nos permita, a nosotros mismos, disfrutar de la buena vida, en otras palabras ser egoístas, ¿egoístas?¿no es algo negativo?¿no es a caso un insulto? Pero cómo, si “El término egoísmo hace referencia al amor excesivo e inmoderado que una persona siente sobre sí misma y que le hace atender desmedidamente su propio interés. Por lo tanto,...