Texto Argumentativo

I.NADA MÁS QUE COMENTARIOS.

Podría hablar de un pasado teniendo como referencia mi escasa memoria y alguno que otro vago recuerdo, pero no, porque dejaría a un lado el presente, donde nosotros la juventud somos el futuro del país, de un desarrollo, de una evolución que hemos correteado durante años (o por lo menos eso es lo que la gente cuenta).

Años consecutivos donde los conflictospolíticos son como desde su nacimiento, solo que ahora el cinismo es mayor y el no querer ver se agrava. Los medios radiofónicos y televisivos sólo sirven de entretenimiento, (para taparle el ojo al macho), nos informan lo que pueden, quieren y les conviene, no son solo monopolios, es un oligopolio donde gana el que más ayuda a perder.

Se escucha al señor presidente que para lograr hay quesacrificar (¡familias!, ¡niños! ¡Mujeres!) Porque en sus palabras “vale la pena…todo por un mejor país…un mejor futuro para nuestros hijos”.
Como buenos católicos nos encerramos en nuestras iglesias y rezamos porque no nos suceda lo que al vecino, (y es que bien dicen; que lloren en tú casa, a que lloren en la mía, mejor en la tuya).

Y podría seguir escribiendo lo que escuchamos sin cesar ycomentamos aún más, pero yo solo escribo lo que escucho, lo que veo, lo que siento, y así, ustedes al leerlo sepan algo más, de lo que viene en su libro de historia (considerando que vuelvan a existir) porque mi generación fue de las últimas en conocerlos.

II. NO EXISTEN LAS GUERRAS, PERO SI LAS DIFERENCIAS.

Un entorno donde nos distinguimos por lo que hablamos, vestimos, compramos,vivimos, comemos y tenemos; con la pequeña diferencia de que ahora solo somos 2 clases de personas, o quizás seamos más, eso depende de como lo consideremos. La crisis (como así se le ha considerado a ésta etapa) en la que nos vemos envueltos nos ha llevado a los extremos, si antes no confiábamos en las personas, ahora cualquier acercamiento ajeno, nos provoca repudio y aterra al por mayor.Compartimos el mismo suelo, caminamos y cruzamos palabras con personas desconocidas, que con el tiempo pueda nos arrepintamos (cuestión de enfoques, dijera un conocido) o nos deje huella, todo depende de la experiencia.
Las escuelas se convierten en ese sitio donde convivimos con personas de las cuales nuestros padres siempre han tratado de alejarnos, aún cuando dentro de los mismos colegiosexisten conflictos, el trato coexiste, porque a pesar de lo que piensen los demás, hay algunos que luchan por derrumbar esa barrera que va más allá de lo que llevamos puesto o de lo que nos han impuesto nuestras autoridades (aquellos a los que decimos obedecer: nuestros padres)
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No existen las guerras, pero si las diferencias y aún con todo eso las amistades son lo único que parecieran imposiblede encontrar, no hablo de esa amistad de palabra, sino de aquella que nos hace recapacitar, nos levanta, nos hace sonreír y nos alegra el alma. Aquella en la que no importa religión, color o la marca del tenis, sino la honestidad de cada palabra.

III. Y ENTRE TANTA LETRA.

Dentro de tanta palabrería, mis amistades no siempre han sido del agrado de mi familia (no sé porque, pero creo no soy laúnica) podría clasificarla como la típica familia mexicana, pero eso abarcaría más de lo que quisiera y menos de lo que puedo generalizar, si consideramos que cada cabeza guarda un millón de ideas, que lo hace único ante los demás.

Con abuelos cariñosos, pero enojones que comentan sin cesar o que en escasos momentos observan, analizan y callan. Tías de las que se no se tiene algún recuerdograto, al menos no aún. Primos que caminaron a tú lado, se rasparon las rodillas, compartieron biberones, y ahora solo queda el recuerdo de momentos que se disfrutaron cuando todavía se es niño, cuando no habíamos aprendido a guardar rencor, llevando la esperanza de volvernos a frecuentar, viviendo a unos cuantos kilómetros.
Y en éste momento, puedo llegar a la conclusión de que mi familia no...