Y Deje De Creer En Dios

...Y DEJÉ DE CREER EN DIOS Javier Ramírez Viera

Escritia.com Lulu.com Amazon.com 2012, Las Palmas de Gran Canaria, España. Printed in USA-Impreso en Estados Unidos. Todos los derechos reservados. Quedan terminantemente prohibidas, sin la autorización escrita del titular del copyright, bajo las sanciones establecidas por las leyes, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquiermedio o procedimiento, comprendidos la reprografía y el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares de la misma mediante alquiler o préstamos públicos.

Cita: Dios, o mas bien la ficción de dios, es, pues, la consagración y la causa intelectual y moral de toda esclavitud sobre la tierra, y la libertad de los hombres no será completa más que cuando hayan aniquilado completamentela ficción nefanda de un amo celeste. Mijaíl Alexándrovich Bakunin, (1814-1876) pensador revolucionario ruso.

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CONSIDERACIONES INICIALES ¿En éste un libro necesario? …Habida cuenta de su contenido, no sólo es necesario, sino de un carácter urgente. Quienquiera que no comparta esta afirmación (luego que incluso no comparta ese contenido) podría estar participando en un acto de solidaridad(y complicidad) para con fuerzas peligrosas que ponen en serio riesgo la consecución de un mundo mejor (como ya está más que demostrado). De todos modos, por anticipado pido disculpas (hasta donde sea moral y éticamente permisible) a todas aquellas personas que pudieran ofenderse al leer este libro; ojalá toda esa clase de personas sean las que pidan disculpas sinceras, algún día, a todas aquellasotras personas que, sin ningún interés escondido, lucharon por conseguir para nuestros hijos un lugar mejor donde vivir. ¿Por qué existe, entonces, este libro? …Porque, desafortunadamente para mi visión de este mundo, ha caído en mis manos una información que no puedo soslayar. Nadie debería soslayarla, porque hacerlo supone hacerse partícipe de los crímenes y traspiés a La Humanidad que van arelatarse a continuación. Traduciéndolo de alguna manera, no hablar de ello no comporta hacer desaparecer el problema… sino solaparlo, algo que podría tener consecuencias desastrozas si permitimos que la naturaleza salvaje del ser humano, en mezcolanza con la religión, dé como resultado un nuevo período de obscurantismo en nuestra civilización.

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INTRODUCCIÓN Aún no había cumplido los cincoaños, cuando mi hijo me preguntó: “Papá, ¿por qué existimos?” Evidentemente, me quedé helado. Al tiempo, ampliamente orgulloso de que mi hijo tuviera esa inquietud y, sobretodo, por iniciativa propia… pero, asimismo, en ese momento me maldije pensando: “oh, no, otro maldito pensador en casa”. Por entonces no le respondí, a sabiendas que no tenía la respuesta en mis manos y, seguramente, jamás lleguea tenerla. Simplemente, lo invité a que, por ahora, dejara de pensar en ello. …Recuerdo que, en mi adolescencia, dejé de ser creyente para “convertirme” (o, mejor dicho, para redescubrirme) plenamente ateo. Fue paradójico, porque yo era un buen creyente y, andando aquellos años en mi fracaso escolar, no ponía en tela de juicio ninguno de los parámetros de la existencia citados en La Biblia. Losaceptaba rezando todas las noches… …Y, en aquel preciso día en compañía de unos amigos, yo cruz de Cristo al cuello, como buen predicador me desfogué de coraje criticando la falta de respeto de dos humoristas españoles de la tele haciendo una parodia inocente de unos obispos, alegando, mi parecer, que era una intolerable burla al cristianismo. Ese mismo día, por la tarde, llegó a mis manos (norecuerdo cómo) un atlas del Universo. Bastante simplón, simplificado… pero suficiente para que descubriera las supernovas, las galaxias, los agujeros negros, la magnitud del Universo… Lo leí en una noche, de una tajada, releyéndolo varias veces en aquella madrugada… y recuerdo haber concretado, en voz alta, algo así como: ¡Dios NO existe! Por entonces, yo aún no sabía nada de filosofía, ni había
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