Filosofia Clasica Aleman
1. Las raíces históricas de la filosofía clásica alemana El afianzamiento del mcxio capitalista de producción y la transformación de la burguesía en la clase que domina económicamente en Europa Occidental condicionan en la segunda mitad del siglo XVIII nuevos cambiossocioeconómicos. Las primeras revoluciones burguesas de los siglos XVII y XVIII han desbrozado el camino al desarrollo capitalista no sólo en los países donde han impuesto la demolición del régimen feudal, sino también en todo el Occidente europeo. Esto concierne en mayor grado todavía a la revolución francesa de 1789-1794, que ejerce inmensa influencia liberadora sobre los países de Europa, despertando enellos un movimiento revolucionario que apunta contra el feudalismo y coadyuvando a la expansión de una nueva ideología, la ideología burguesa, históricamente progresiva, que proclama el derecho de cada ciudadano a la libertad, a la felicidad y a la propiedad privada, derecho que negaba la ideología feudal y que ahora se juzga "natural" e inalienable. Los ideólogos de la burguesía, a la sazónavanzada, revolucionaria, proclaman al hombre ser supremo y soberano de la naturaleza y afirman que el género humano ha emprendido un progreso social acelerado que conducirá al bienestar universal y al reino de la razón y la libertad. En su lucha contra las caducas relaciones sociales del feudalismo, los ideólogos burgueses, que no ven aún los antagonismos inherentes al régimen capitalista,contraponen a aquellas relaciones el ordenamiento burgués "racional" y, como a ellos les parecía, "natural". El desarrollo de la economía capitalista va desmantelando más y más las relaciones económicas feudales, estancadas en grado considerable, y engendra nuevos sectores de la produc-
Historia de la filosofía premarxista, Progreso, Moscú 1978
LA FILOSOFÍA CLÁSICA ALEMANA. LAS DOCTRINAS...
311ción, nuevas clases y grupos sociales y nuevas necesidades sociales y personales. La revolución industrial de Inglaterra, el formidable incremento de la productividad del trabajo, de la cuantía y el ritmo de la producción social y las conquistas de la ciencia de la naturaleza parecen abrir al progreso social perspectivas ilimitadas y multilaterales. Pero el feudalismo no ha sido aúntotalmente aniquilado en el ámbito político. Sus fuerzas sociales desempeñan todavía un papel relevante incluso en los países donde la burguesía ha conquistado el poder político; y en aquéllos (que son la mayoría) donde el desarrollo de la economía capitalista no ha dado lugar aún a la transformación revolucionaria burguesa se encuentran en el poder y se niegan a compartirlo con la clase nueva, laburguesía. La restauración de la monarquía semifeudal de los Borbones en Francia y el Congreso de Viena, que agrupa a todas las fuerzas monárquicas feudales de Europa, son pruebas fehacientes de que la reacción tiene todavía empuje y de que trata de pasar a la contraofensiva. Ahora bien, la burguesía barrunta peligros n o sólo desde la derecha, sino también desde la izquierda, por parte de las masasoprimidas y explotadas, sobre las que el afianzamiento del capitalismo y del progreso con él relacionado abaten nuevas privaciones, más miseria y más explotación. Las contradicciones dentro del "tercer estado", que ya se habían dejado sentir en las primeras revoluciones burguesas, se vuelven abierto antagonismo de clase tan pronto la burguesía se instala en el poder. Así las cosas se acentúa en laideología burguesa —que nunca ha brillado por su consecuencia revolucionaria— la proclividad a la avenencia con las fuerzas viejas, feudales, tanto más cuanto que, a su vez, estas últimas se adaptan al ordenamiento capitalista y, en cierta medida, se aburguesan. Estas contradicciones y tendencias se advierten con particular realce en Alemania, donde infinidad de escollos económicos y políticos...
Regístrate para leer el documento completo.