Herzog
Jesús Silva Herzog(
EN BUSCA DE UNA DEFINICIÓN
Nadie puede negar que han existido y existen numerosos fenómenos económicos en todas las sociedades; ni tampoco que tales fenómenos obedecen a causas determinadas. Si un fenómeno se repite varias veces y de igual manera, es obvio que obedece a la misma causa. Entonces es posible describir los principios olas leyes que explican la causa y los fenómenos correspondientes. De lo anterior se deduce lógicamente que la economía es una ciencia. ¿Pero qué clase ciencia es la economía? Aquí se impone ensayar una respuesta.
El economista francés Juan Bautista Say opinaba que la economía debía ser objetiva, concreta, teórica y descriptiva; que debía exponerse fríamente cómo se producen y distribuyenlas riquezas, sin sermones. Por su parte el ginebrino Juan Carlos Leonardo Sismondi describió que la economía es una ciencia moral y su objeto no es la riqueza, sino el bienestar físico del hombre. Ya su vez, el inglés Guillermo Stanley Jevons decía textualmente; "La economía debe tener un carácter tan matemático como las ciencias físicas... En mi opinión nuestra ciencia ha de ser matemática,sencillamente porque trata de las cantidades."
Claramente se distinguen las opiniones divergentes de los autores citados. Say fue un economista clásico liberal y creyente de la existencia de leyes naturales reguladoras de la vida económica. Sismondi puede clasificarse como un crítico social, moralista y precursor del historicismo, escuela que afirmaba categóricamente que las leyes de laeconomía no son naturales, sino históricas; y Jevons fue uno de 1os primeros marginalistas, junto con Menger y Walras. El marginalismo, que tanto éxito ha tenido en la historia de las doctrinas económicas, es una mezcla de ingredientes psicológicos y lucubraciones matemáticas. Por supuesto, estas concepciones y doctrinas no han sido las únicas en el pasado ni lo son en el presente. Hay muchas otras delas cuales sería ocioso ocuparnos en este lugar.
La opinión de Say de que la economía debe limitarse a describir fríamente los hechos, a informar al lector cómo se producen, distribuyen y consumen las riquezas, no puede aceptarse en nuestros días; si así fuera no podría hablarse de política económica, de desarrollo económico ni de una mejor distribución del ingreso; no podría hablarse deplanear la economía de un país o de una región. Toda política económica debe basarse en el estudio profundo de la realidad con el claro propósito de superarla. Salta a la vista el absurdo de siquiera pensar en una política económica regresiva, que implicara marcha hacia atrás, no hacia delante. Reducir la economía a una ciencia descriptiva es negar su calidad científica, es hacer de ella unaespecie de botánica primitiva, es, en fin, un grave error que todavía cometen ciertos economistas de muy discutible talento e ilustración. La economía no es una ciencia matemática como pensaba Jevons. Es cierto que se ocupa de cantidades; es más cierto también que entre esas cantidades está el hombre y que el hombre no es una mera cantidad. Aquí está la diferencia fundamental entre la sociología y lasciencias físico-matemáticas. El hombre es el ser más complejo del mundo que habitamos. Por esa complejidad, no se puede reducir a cifras, ni pueden las matemáticas abarcarlo en su oscura y a la par luminosa personalidad. El hombre es un animal admirable pero imperfecto. Lógicamente es admirable pero imperfecto todo lo que realiza. Lo único que lo salva es la eterna inconformidad con suimperfección. "El Hombre -dice Croce- es una síntesis de la historia universal. " La historia es el drama del hombre y es obvio que el drama escapa del guarismo y que no cabe representarlo ni por cien ni por mil ni por diez mil.
Tampoco puede reducirse a números la emoción estética: la Piedad de Miguel Ángel o la Novena Sinfonía de Beethoven. No hay balanza de precisión para medir el orden, el...
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