Historia Social
EL MUNDO EN 1780-1790
I
Lo primero que debemos observar acerca del mundo de 1780-1790 es que era a la vez mucho más pequeño y mucho más grande que el nuestro. Era mucho más pequeño geográficamente, porque incluso los hombres más cultos y mejor informados que entonces vivían —por ejemplo, el sabio y viajero Alexander von Humboldt (1769-1859) — sólo conocían algunaspartes habitadas del globo. (Los «mundos conocidos» de otras comunidades menos expansionistas y avanzadas científicamente que las de la Europa occidental eran todavía más pequeños, reducidos incluso a los pequeños segmentos de la tierra dentro de los que el analfabeto campesino de Sicilia o el cultivador de las colinas birmanas vivía su vida y más allá de los cuales todo era y sería siempreabsolutamente desconocido.) Gran parte de la superficie de los océanos, por no decir toda, ya había sido explorada y consignada en los mapas gracias a la notable competencia de los navegantes del siglo xviii como James Cook, aunque el conocimiento humano del lecho de los mares seguiría siendo insignificante hasta la mitad del siglo xx. Los principales contornos de los continentes y las islas eranconocidos, aunque no con la seguridad de hoy. La extensión y altura de las cadenas montañosas europeas eran conocidas con relativa exactitud, pero las de Hispanoamérica lo eran escasamente y sólo en algunas partes, las de Asia apenas y las de África (con excepción del Atlas) eran totalmente ignoradas a fines prácticos. Excepto los de China y la India, el curso de los grandes ríos del mundo era desconocidopara todos, salvo para algunos cazadores de Siberia y madereros norteamericanos, que conocían o podían conocer los de sus regiones. Fuera de unas escasas áreas —en algunos continentes no alcanzaban más que unas cuantas millas al interior desde la costa—, el mapa del mundo consistía en espacios blancos cruzados por las pistas marcadas por los mercaderes o los exploradores. Pero por las burdasinformaciones de segunda o tercera mano recogidas por los viajeros o funcionarios en los remotos puestos avanzados, esos espacios blancos' habrían sido incluso mucho más vastos de lo que en realidad eran.
No solamente el «mundo conocido» era más pequeño, sino también el mundo real, al menos en términos humanos. Por no existir censos y empadronamientos con finalidad práctica, todos los cálculosdemográficos son puras conjeturas, pero es evidente que la tierra tenía sólo una fracción de la población de hoy; probablemente, no más de un tercio. Si es creencia general que Asia y África tenían una mayor proporción de habitantes que hoy, la de Europa, con unos 187 millones en 1800 (contra unos 600 millones hoy), era más pequeña, y mucho más pequeña aún la de las Américas. Aproximadamente, en 1800, dosde cada tres pobladores del planeta eran asiáticos, uno de cada cinco europeo, uno de cada diez africano y uno de cada treinta y tres americano y oceánica' Es evidente que esta población mucho menor estaba mucho más esparcida por la superficie del globo, salvo quizá en ciertas pequeñas regiones de agricultura intensiva o elevada concentración urbana, como algunas partes de China, la India y laEuropa central y occidental, en donde existían densidades comparables a las de los tiempos moderno Si la población era más pequeña, también lo era el área de asentamiento posible del hombre. Las condiciones climatológicas (probablemente algo más frías y más húmedas que las de hoy, aunque no tanto como durante el período de la «pequeña edad del hielo», entre 1300 y 1700) hicieron retro-ceder loslímites habitables en el Ártico. Enfermedades endémicas, como el paludismo, mantenían deshabitadas muchas zonas, como las de Italia meridional, en donde las llanuras del litoral sólo se irían poblando poco a poco a lo largo del siglo xix. Las formas primitivas de la economía, sobre todo la caza y (en Europa) la extensión territorial de la trashumancia de los ganados, impidieron los grandes...
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