Identidad Terrenal

3.4 IDENTIDAD Y CONCIENCIA TERRENAL.
Como se ha indicado en el capitulo 3 del libro de Morin, todos tenemos una identidad genética, cerebral, afectiva común a través de nuestras diversidades individuales, culturales y sociales. Todos los humanos desde el siglo XX, viven los mismos problemas fundamentales de vida y muerte y están unidos en la misma comunidad de destino planetario.
Ya decía Kantque la finitud geográfica de nuestra tierra impone a sus habitantes un principio de hospitalidad universal, reconociendo al otro el derecho de no ser tratado como enemigo. A partir del siglo XX, la comunidad de destino terrestre nos impone de manera vital la solidaridad.
Por esto, es necesario aprender a “estar ahí” en el planeta, o sea, aprender a vivir, compartir, comunicarse, y eso es algo quesolo aprendemos en y en todas las culturas singulares. Partiendo desde ese lugar debemos dedicarnos no solo a dominar, sino a acondicionar, comprender y mejorar.
No es solo hacerse parte del proceso de mundialización y seguirlo según su estado actual sino como mencionó el filósofo Fernando Savater “uno puede estar a favor de la globalización y en contra de su rumbo actual, lo mismo que se puedeestar a favor de la electricidad y contra la silla eléctrica”.
3.5 PENSAMIENTO POLICENTRICO Y EDUCACION.
Este planeta necesita un pensamiento policéntrico capaz de apuntar a un universalismo no abstracto sino conciente de nuestra unidad/diversidad como seres humanos. Un pensamiento policéntrico que provenga de cada una de las diferentes culturas del mundo. Este pensamiento debe nutrirse delpatrimonio cultural de toda la humanidad y debe tender a mejorar las condiciones de vida de las personas y a crear un orden de paz mundial. Educar para este pensamiento, esa es la finalidad de la educación del futuro que desde ya debe ser aplicada para generar una identidad y conciencia terrenal.
La búsqueda de esta educación multidimensional es el intento de renovar, dentro del contexto de un mundoglobalizado, es la reivindicación de una educación cosmopolita, comprometida con la tarea de humanizar a nivel mundial las condiciones de vida.
Sin embargo debemos tener presente que la forma de educar actual es inadecuada para hacer frente a las tareas del mañana. No se necesita una ofensiva educativa, sino un cambio de rumbo de la educación. Hasta la fecha, la educación no nos ha protegido detomar el camino en dirección a un desarrollo no sostenible.
La educación es un requisito imprescindible para iniciar y canalizar un desarrollo sostenible. Existe en nuestra realidad global la necesidad de invertir más recursos, y no solo económicos, en la educación si se pretende solucionar en forma pacífica, solidaria y constructiva los futuros problemas de un mundo cada vez másinterrelacionado.
La educación actual persiste en gran medida en la entrega de depósitos de conocimientos, que una vez que los alumnos abandonan la escuela por lo general ya son obsoletos. Además se prepara a los alumnos para un entorno vital nacional, en tanto que lo que hoy se precisa es una internacionalización de la educación. Debemos buscar un nuevo modo de ver, nuevos parámetros y pautas que nos permitanapreciar y percibir como un todo tanto los problemas globales de la humanidad como los mundos y entornos locales, y que nos permitan vincular ambos.
Podemos confiar en las posibilidades humanas aún no exploradas en profundidad. Nadie puede asegurar que nuestras sociedades hayan agotado sus posibilidades de mejora y transformación y que hayamos llegado al fin de la historia. Se puede confiar en elprogreso de las relaciones entre humanos, individuos, grupos, etnias y naciones.
Estas posibilidades restauran el principio de esperanza pero sin certeza científica ni promesa histórica. Son posibilidades inciertas que dependen en gran parte de la toma de conciencia, de la voluntad y del ánimo. Sin embargo deben comenzar a ser utilizadas para generar el esperado cambio de conciencia.
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