INDICE DE POBREZA 80 14
vuelven a poner en el centro de la atención mundial la gravedad inusitada que ha cobrado la
desigualdad en el contexto global más actual. Según Oxfam, el año pasado el 1% más rico
del planeta era dueño del 48 por ciento de la riqueza del mundo. Pero las tendencias tienden
a agravarse: en el 2016 ese 1%tendrá más del 50% y en el 2019 más del 54%. Si
desagregáramos los grandes segmentos, nos encontraremos con asimetrías incluso más
irritantes: en el 2014, el 20% del 99% concentraba el 46.5 % de ese restante 52, al tiempo
que las ochenta personas más ricas del planeta poseen actualmente lo mismo que los 3.600
millones de personas más pobres. En ese contexto escandaloso, la situación de América
Latina,a pesar de haber mejorado en la última década, sigue manteniendo guarismos muy
preocupantes. Según el Banco Mundial y el Centro de Estudios Distributivos, Laborales y
Sociales (CEDLAS), América Latina es la segunda región más desigual del planeta (52,9 de
coeficiente de Gini), apenas por debajo del África Subsahariana (56,5) y seguida desde
bastante lejos por Asia (44,7) y por Europa del Este yAsia Central (34,7). Por su parte, el
recientemente publicado Panorama Social de América Latina 2014 de la Comisión
Económica para América Latina de las Naciones Unidas (CEPAL) ha registrado un
estancamiento en la baja de la pobreza: el porcentaje de personas con ingresos inferiores a
la Línea de Pobreza fue 28.1 en el 2013, al igual que en el 2012, y se proyecta que baje
apenas en una décimaporcentual para el 2014 (Gráfico 1).
Como bien ha advertido la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena: “... la
recuperación de la crisis financiera internacional no parece haber sido aprovechada
suficientemente para el fortalecimiento de políticas de protección social que disminuyan la
vulnerabilidad frente a los ciclos económicos. (…) Ahora, en un escenario de posible
reducción de losrecursos fiscales disponibles, se requieren mayores esfuerzos para
apuntalar dichas políticas, generando bases sólidas con el fin de cumplir los compromisos de
la agenda de desarrollo post-2015.”
Registros o análisis similares podrían multiplicarse, pero todos convergerían en el
señalamiento acuciante de que la desigualdad sigue alcanzando niveles muy severos en el
continente latinoamericano, pese a loslogros sociales verificados en la última década en la
región. Asimismo, todos esos datos fundarían con solidez la constatación de que esos niveles
de desigualdad, que expresan una larga historia, siguen configurando en América Latina uno
de los principales retos para abatir la pobreza, sustentar el crecimiento económico soberano y
afirmar la democracia.
Períodos
Pero vayamos a lo que nos enseñael análisis de estos temas en el pasado reciente de la
región. Si se examina la evolución de la pobreza y la indigencia (definidas como posesión de
ingresos insuficientes para acceder a determinadas canastas de bienes y servicios, y no a
partir de un conjunto amplio e integral de dimensiones) durante los últimos treinta años en
América Latina y el Caribe se podrán advertir o identificar, concierta facilidad, cuatro
períodos claramente diferenciados.
El primero de los períodos corresponde a los años ochenta del siglo pasado: la llamada
“década perdida”. Como se puede apreciar en el Gráfico 1, entre 1980 y 1990 la incidencia de
la pobreza aumentó de 40.5% a 48.4%, lo que implicó, merced al crecimiento poblacional
registrado en esos años, pasar de 136 a 204 millones de habitantes viviendo enhogares con
ingresos inferiores a la Línea de Pobreza.
La última década del siglo pasado constituye la segunda etapa en esta periodización. En esos
años, en particular durante su primer lustro, se registró una reducción muy moderada de la
pobreza: de 48.4% a 43.8% entre 1990 y 1999. Esta leve caída en los niveles de pobreza y de
indigencia (de 22.5% a 18.5%) se produjo en el contexto de...
Regístrate para leer el documento completo.