indio
La caracterización de Bolivia como una nación mayoritariamente indígena (52 % de la población según el censo de 1846), predominantemente rural (cerca del 90 %), conuna población originaria de fuerte raíz cultural quechua-aimara (la falta de educación en el campo permitió la pervivencia vigorosa de las dos lenguas) y una estructuración social y productivapropias, permite entender la importancia clave de la cuestión agraria.
A lo largo del siglo XIX vivieron en tensión dos concepciones en relación al tema, quienes respetaron el ordenamiento colonial quereconocía la existencia de las comunidades como un sistema mayoritario y legitimo de tenencia de la tierra y quienes al amparo de las ideas liberales buscaron la desestructuración de la comunidad enfavor de la hacienda latifundista a título de modernidad.
Las disposiciones de Bolívar y Santa Cruz (1825 y 1831) ratificaron el respeto a la comunidad, entre otras cosas porque el país vivía enbuena medida del tributo indígena que sólo empezó a declinar a pan ir de 1860 con el auge de la plata. Hasta 1860 la recaudación por tributo indigenal cubría aproximadamente el 30 % de los ingresosfiscales de Bolivia.
El primer paso hacia el nuevo orden agrario se dio en el gobierno de Melgarejo. Las ideas de José Vicente Dorado, publicadas en 1864, planteaban sin eufemismos la necesidad dearrebatarles la tierra a los indígenas sobre la premisa de que costos, indolentes, ignorantes y carentes de conocimientos técnicos, mantendrían el estancamiento de la agricultura; en cambio los blancosprogresistas mecanizarían el campo y lo harían más productivo. El indio, según Dorado, pasaría de propietario pobre a colono rico y acomodado. La cruel ironía de estas ideas que buscaban lafeudalización, salta a la vista.
El 20 de Marzo de 1866 Mariano Melgarejo decretó la obligatoriedad para los indígenas de recabar sus títulos de propiedad pagando para ello entre 25 y 100 bolivianos según el...
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