La Prostitucion
(ANTECEDENTES)
En los albores de la humanidad, mucho antes de que se convirtiera en un oficio, el acto sexual ya estaba tarifado. Antes de pasar a ser la profesión de sacerdotisas, de cortesanas y de rameras, el coito, solicitado por méritos, fue inicialmente un acto de adoración del macho, por el sexo de la hembra.
Desde la edad Paleolítica, el hombre delas cavernas, admirado por el triángulo que se dibuja doblemente en el pubis y la vulva de la compañera, lo plasma en un dibujo. Un fresco en actitud de adoradora suplicación, ante una mujer de mayor estatura que el, con perifollos y un triángulo sexual bien visible a la cual ofrenda regalos (el producto de la caza). Nada permite deducir que el desconocido esta protestando ante la imagen deministro de la maternidad, sino más bien ante la del triángulo erótico, ( habida cuente de que no era necesario, de que la mujer se mostrara desnuda, emperifollada, para agradar con sus adornos, puesto que, a causa del frío el hombre del Paleolítico iba muy bien cubierto ). No hay pues otra cosa que ver en este documento, sino la representación de una solicitación sexual, por medio de remuneraciones.Es posible que en aquella época la venalización del acto sexual no hubiese sido impuesta por la mujer, sino más bien considerada por el hombre cómo, una ofrenda a aquella que poseía las virtudes esenciales de su gozo.
Si cotejamos esta imagen con todas las demás que conocemos de aquellos tiempos remotos, podemos comprobar el hecho siguiente: ningún testimonio plástico muestra ala madre con el hijo, en cambio, no deja de ser extraño que el acoplamiento figure frecuentemente representado. Sin duda, esta no sería la prueba de que solo el erotismo figura representando el triángulo, sino pudiese apoyar esta observación de las conclusiones de los trabajos de muchos etnólogos que ponen de manifiesto que, “el papel masculino en la procreación escapó por completo a lacomprensión de los hombres del Paleolítico.
El hecho de que el hombre del Paleolítico considerara a la mujer cómo una divinidad del placer que ella le proporciona, es un detalle de notoria importancia, por que si la prostitución está inevitablemente ligada a la organización de las relaciones sexuales humanas, ella debe mucho sobre todo a la guerra de los sexos, en la que en esta hubo que afrontarpara decir cual de estos dominaría al otro.
Verosímilmente, la comprensión de su propia génesis no atormentó al hombre mientras vivió en la caverna. Tenía una mujer para satisfacer sus impulsos sexuales y darle hijos que, una vez criados, abandonan la familia para subsistir por sus propios medios.
Habrá que esperar a la época magdaleniense (que señala el paso del Paleolítico alNeolítico) para que hombre adquiera el sentido del parentesco que le distingue realmente de loa animales: cuando paralelamente a las primeras viviendas construidas nacen las tribus. El sentido del bien tribal marca uno de los primeros signos de delimitación de los grupos sociales. El espíritu del clan da paso a la idea de familia y a la necesidad de establecer un código que permita reconocer unadescendencia a la que transmitir sus bienes propios.
De una manera natural, la mujer (puesto que es ella quien trae los hijos al mundo) impone el reinado del matriarcado que se convertirá después en una total ginecocracia.
En ésta época “el triángulo” adquiere un segundo sentido: el símbolo del poder, que tienen las mujeres, perpetuar la raza. Posteriormente encontramos estesímbolo en la base de todos los cultos y religiones. Sin embargo, el hombre primitivo irá tomando progresivamente conciencia del papel que él desempeña en su propia génesis.
El matriarcado impulso a la ginecocracia y esta a su vez, la poliandria. Las mujeres son adoradas por dos razones: por su sugestión erótica y por su poder de engendrar descendencia. Pero el hombre que caza,...
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