Memoria colectiva
“La identidad social se define y se afirma en la diferencia”.
La identidad, así entendida, constituye un hecho enteramente simbólico construido, según Fossaert, en y por el discurso social común, por que solo puede ser efecto de representaciones y creencias ₍ social e históricamente condicionadas₎, y supone un percibirse y un ser percibido que existefundamentalmente en virtud del reconocimiento de los otros, de una “mirada exterior”. Poseer una determinada identidad implica conocerse y reconocerse como un tal, y simultáneamente darse a conocer y hacerse reconocer como un tal. Por eso, la identidad no es solamente efecto si no también objeto de representaciones. Y en cuanto tal requiere, por otra, de símbolos, emblemas, balsones y otras formas de variedadsimbólica.
Toda identidad pretende apoyarse en una serie de criterios, marcas o rasgos distintivos que permiten afirmar la diferencia y acentuar los contrastes. Los más decisivos, sobre todo tratándose de identidades ya instituidas, son aquellos que vinculan de algún modo con la problemática de los orígenes. Pero al lado de estos, pueden desempeñar también un papel importante otros rasgosdistintivos estables como el lenguaje, el sociolecto, la religión, el estilo de vida, los modelos de comportamiento, la división de trabajo entre los sexos, una lucha o reivindicación común, entre otros, sin excluir rasgos aparentemente más superficiales, como los señalados por Max Weber a propósito de los grupos étnicos: el vestido, el modo de alimentarse y hasta el arreglo de la barba y del peinado.Según Bourdieu se puede comprender mejor la realidad de las identidades sociales si se sustituye la falsa alternativa entre objetivismo y subjetivismo por la distinción entre identidades establecidas o instituidas, que funcionan como estructuras ya cristalizadas.
Nos lleva de la mano a la formulación de una nueva tesis: las identidades sociales solo cobran sentido dentro de un contexto deluchas pasadas o presentes: se trata, siempre según Bourdieu, de un caso especial de la lucha simbólica por las clasificaciones sociales, ya sea a nivel de vida cotidiana en el discurso social común, o en el nivel colectivo y en forma organizada, como ocurre en los movimientos de reivindicación regional, étnica, de clase o grupo.
Fossaert trata de establecer correlaciones históricas entre lasdiferentes formas de identidad social, y las diferentes configuraciones de las redes de sociabilidad condicionadas por el grado de desarrollo social en una fase determinada de la historia. He aquí la tipología de las formas de sociabilidad propuesta por Fossaert:
1. Dispersión inicial de aldeas.
2. Localismos regionales.
3. Racimo de regiones.
4. Entramado simple. Interconexiónacentuada entre regiones y localidades por el comercio, las vías de comunicación, la centralización urbana y la aparición de los primeros media como el telégrafo y la radio.
5. Doble entramado: reduplicación de la interconexión general de la población por la plena expansion de los meda modernos, como la televisión y la electrónica, en general, mas urbanización generalizada.
Las identidadescolectivas remiten frecuentemente, a una problemática de las raíces o de los orígenes asociada invariablemente a la idea de una tradición o de una memoria. Rencontrar la propia identidad dice Regine Robín es un primer término reencontrar un cuerpo, un pasado, una historia, una geografía, tiempos, lugares y también nombres propios.
La memoria puede definirse brevemente como la ideación del pasado, encontraposición a la conciencia ideación del presente y la imaginación prospectiva o utópica ideación del futuro, del porvenir.
La memoria puede ser individual colectiva según que sus portadores o soportes subjetivos sean el individuo o una colectividad social.
Según Halbwachs, la memoria colectiva es la que tiene por soporte un grupo circunscrito en el espacio y en el tiempo. Pensaba...
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