Menigitis
Aunque cualquier persona puede contraer meningitis, es unaenfermedad especialmente frecuente en niños y personas inmunosuprimidas. Los síntomas más frecuentes son dolor de cabeza y rigidez de la nuca que tiende a asociarse con fiebre, intolerancia anormal a la luzo a los sonidos y trastornos de la consciencia. A menudo, especialmente en niños pequeños, sólo se presentan síntomas inespecíficos, tales como irritabilidad y somnolencia. Si se presentan erupcionesen la piel, puede indicar una forma particular de meningitis, como la meningococcemia.
La meningitis se diagnostica con un procedimiento médico llamado punción lumbar,[3] en la que se inserta unaaguja especial dentro de la columna vertebral para extraer una muestra de líquido cefalorraquídeo, que rodea al cerebro y la médula espinal. El tratamiento tiene que ser inmediato, con el uso deantibióticos en el caso de infecciones bacterianas o antivirales en el caso de meningitis virales. En algunos casos se indica la administración de corticoesteroides como la dexametasona para prevenir lassecuelas de la inflamación, pues tienden a producir una mejor evolución neurológica.[4]
La meningitis puede potencialmente causar consecuencias serias de larga duración, como sordera, epilepsias,...
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