reformas en china
China ha puesto en marcha el mayor plan de reformas económicas y sociales en décadas. Y, al mismo tiempo, ha roto con algunas herencias del pasado.
Ha decidido liberalizar más los mercados, otorgar un mayor papel a la empresa privada, poner fin a los campos de reeducación por el trabajo, suavizar la política del hijo único yreducir "paso a paso" el número de crímenes que son objeto de pena de muerte, entre otros, según un documento hecho público este viernes por la agencia oficial Xinhua con las decisiones adoptadas en el Tercer Pleno del 18 Comité Central del Partido Comunista Chino (PCCh), clausurado el martes pasado tras cuatro días de conciliábulo.
El texto aporta detalles al listado de conclusiones generalesemitido tras el cierre del pleno, en el que lo más destacado fue el impulso a la iniciativa privada en la economía y la creación de un comité de seguridad estatal, que concentra más poder bajo el mando directo del presidente, Xi Jinping.
Los detalles revelados despejan cualquier duda sobre la consolidación de el presidente Xi Jinping en el poder y la intención de los líderes chinos de reformar enprofundidad la economía para hacerla menos dependiente de las inversiones y la exportación, y más del consumo interno. La clave será ahora la implantación de este ambicioso paquete de medidas.
POLÍTICA DE HIJO UNICO
Otra de los cambios anunciados por el Gobierno chino es que permitirá que millones de familias tengan un segundo hijo, la liberalización más significativa en más de tres décadas de suestricta política familiar. China es el país más poblado del mundo, con casi 1.400 millones de habitantes.
Sin embargo, esta flexibilización de la política del hijo único es una etapa decisiva pero de impacto limitado en China, que deberá ir más lejos para desactivar "la bomba demográfica" que representa el envejecimiento desu población. Pekín reveló que las parejas en las que un miembro es hijo único podrán tener dos hijos.
"No me sorprendería nada que de aquí a un año hubiera nuevas medidas de flexibilización e incluso se abandonaran por completo todas las restricciones”, declaró Wang Feng, Director del CentroBrookings-Tsinghua de políticas públicas en Pekín.
"El gobierno está tanteando el terreno. Saben que hay que deshacerse de esta política del hijo único, la cual no beneficia a nadie", añadió.
La ley de planificación familiar se aplicó a partir de 1979 para permitir a China controlar su población, la más numerosa del mundo. Según las autoridades permitió evitar 400 millones de nacimientos.
Laley prohíbe que se tenga más de un hijo, pero se fueron introduciendo excepciones para las minorías étnicas o los matrimonios rurales cuyo primer hijo fuese una niña y para las parejas en las que los dos miembros son hijos únicos. Lo que significa que la regla del hijo único no se aplicaba ya en el 37% de las parejas chinas, según un estudio de 2007, y además los matrimonios acomodados no dudan entener un segundo hijo aunque para ello tengan que pagar una multa.
Según expertos, la flexibilización anunciada representará un cambio para 10 millones de matrimonios en China, con 1.300 millones de habitantes.
No va a afectar a mucha gente, y no generará nacimientos suficientemente numerosos para cambiar radicalmente las tendencias demográficas de China. Pero es la mayor reforma deplanificación familiar desde su puesta en marcha y una etapa decisiva hacia su abolición.
“Ya era hora, ya no hay preocupación de sobrepoblación, debido a un índice de fecundidad actual de 1,5 hijo por mujer, el cual esta muy por debajo de los 2,1 hijos que supuestamente garantizan la renovación de las generaciones, reaccionó Joan Kaufman, experto en política pública del Columbia Global Centers en Pekín....
Regístrate para leer el documento completo.