Adolecer


“Pero cuando yo era chico” y “yo te entiendo porque también pase por eso” son de las frases más comunes que le decimos a nuestros hijos cuando los corregimos o regañamos, y estoy segura que todoslo hemos dicho por lo menos una vez.

La idea de que los adolescentes y padres no se llevan bien surgió del psicólogo G. Stanley Hall, quien dijo que “los esfuerzos de los jóvenes para adaptarse alcambio de su cuerpo y ante las inminentes exigencias de la edad adulta se presentan en un periodo de tormenta y estrés, el cual, inevitablemente conduce a conflictos entre las generaciones.” Y escierto que también tuvimos su edad pero es totalmente distinto lo que nosotros vivimos como adolescentes a lo que ellos viven ahora, porque para empezar nosotros no teníamos el internet o no teníamostanto acceso a él como ellos lo tienen ahora; basta picar una pantalla para tener frente a ellos un mundo de información. Las adicciones al alcohol y las drogas no se daban tanto pues tampoco era tanfácil conseguirlos ni era tal la presión de la sociedad y menos a tan corta edad.

Es cierto que a esa edad se sienten invencibles, quieren correr antes de caminar y llevar la contra de todo. No es queno importe lo que los papás tengamos que decirles o aconsejarles, estamos para formarlos y sacar lo mejor de ellos pero cuando les impedimos hacer ciertas cosas o simplemente no coincidimos con superspectiva u opinión sacan las garras para intentar hacernos ver que los que están bien son ellos y no nosotros. Para que estas discusiones no pasen a mayores es importante tener una buena comunicacióno por lo menos saber llegar a buenos acuerdos. La antropóloga Margaret Mead, quien estudio a los adolescentes en culturas occidentales, concluyó que cuando se tiene una relación estable basada en lacomunicación los problemas tienden a ser menores; “Sólo entre 15% y 25% de las familias reportan conflictos significativos y en ellas, a menudo, se presentan problemas antes de que los niños se...