algún día veremos

ALGÚN DÍA VEREMOS.

Mientras miramos sin observar, transcurren los tiempos de cuando sucede la enorme paradoja de la comunicación sinencuentros, de la comunicación sin manos ni los dedos indicando la verdad o la mentira ni los gestos corporales que la acompañan, sin las alas aleteantes de las palabras subversivas.
Nuestros ojosciegos de pantalla no entregan el brillo del alma y ni siquiera son capaces de captar la intensidad de la mirada: la pantalla lo entrega todo, la pantalla no entrega nada.
Después andaremos buscandomiradas en los espejos y sólo encontraremos nuestros ojos yermos ansiando la humedad de una lágrima.
Los emoticones pretendieron reemplazar todos nuestros gestos como ayer las risas grabadasreemplazaban la alegría de los espectadores ausentes.
Las palabra escritas son apenas un murmullo si no está tu cuerpo presente, si no está tu aliento, tu alegría o tu pena, tu alma. La luminosidad eléctricano es capaz de entregarme ese aroma secreto que me remueve las entrañas, que me provoca una sonrisa, que me acelera el pulso o que me inhibe los pensamientos.
Yo quiero estar contigo, quiero sentirtu mano, tus ojos y tu pelo enredado en mis manos. Quiero que te enojes por aquella idea distinta y por esa fe encontrada, por los sentimientos opuestos, por el café endulzado y por el pan desabrido,sin nada. Quiero que lloremos la cebolla, que nos curemos de vino y nos enojemos de nada.
Pero sigue allí la pantalla inmediata que te reemplaza tan lejos.
Y su brillo hipnótico, parpadeantesolapado, se niega a darme la libertad para mojarme bajo la lluvia y despeinarme enfrentando el viento. No puedo salir a escuchar el canto de los pájaros que intentan sobrevivir en este enjambre dehumo, posados en los árboles helados de fierro y duros de cemento o en las casas heladas de pantallas titilantes capturando primaveras sin flores.
Debe ser la venganza de los neones por dejarlos con...