Amartya Sen

ufeffIdentidad y violencia. La ilusión del destino – Amartya Sen
Capítulo 7: Globalización y voz
Según cuál sea el lugar de su nacimiento, los niños cuentan con los medios para una gran prosperidad o se enfrentan a la probabilidad de una vida con desesperantes privaciones, lo que se resume a la existencia de desigualdad de oportunidades.
Las relaciones globales son ante todo de antagonismo yenfrentamiento, más que de apoyo mutuo.
Las críticas antiglobalización expresadas en las manifestaciones que se dan en todo el mundo también incitan a un número mucho mayor de personas para quienes las inmensas asimetrías de los recursos son muy injustas y reprobables. Perciben así un fracaso total de las expectativas acerca de una fuerza moral inducida por una identidad global.
Voz, veracidad yrazonamiento público
Para el autor es un error considerar las privaciones y las vidas empobrecidas como castigos de la globalización y no como fracasos de los acuerdos sociales, políticos y económicos. Sin embargo, las críticas antiglobalización pueden significar un aporte positivo e importante al plantear una serie de preguntas sensatas para el debate público global, registrando y posicionandolas dudas en función de iniciar y promover un proceso de investigación. Los debates generados por estas “dudas globales” pueden considerarse aportes elementales para la práctica de la democracia global.
Crítica, voz y solidaridad global
Algunos críticos de la globalización señalan la ausencia de un sentido eficaz de solidaridad global. El autor pregunta (retóricamente) por qué tantas personasestán tan preocupadas por el estado del mundo y discuten la búsqueda de un mejor trato para los desfavorecidos y los necesitados si, tal como suponen esos críticos, “no hay un sentido de pertenencia global ni una preocupación por la injusticia global”. Esto significa, para Sen, que sí existe un sentido de identidad global y de cierta preocupación por la ética global, y ese descontento generalexpresado en protestas es prueba de ello.
Por otra parte, argumenta que este descontento es, en sí mismo, un fenómeno global, que manifiesta preocupación e interés y lleva a la participación de gente de todo el mundo, más allá de la nacionalidad, la cultura, comunidad o religión. Se trata del movimiento moral más globalizado del mundo.
Solidaridad intelectual
Un sistemático rechazo de laglobalización no sólo resultaría contrario al comercio mundial, sino que también eliminaría los movimientos de ideas, la comprensión y el conocimiento que favorece a todas las personas del mundo. Existe entonces una necesidad de separar las diferentes cuestiones fusionadas en las protestas antiglobalización. La globalización del conocimiento merece la mayor aprobación.
La globalización suele ser percibidacomo un proceso de occidentalización, como una contribución de la civilización occidental al mundo. Fue en Europa donde llegó el Renacimiento, luego la Ilustración y la Revolución Industrial, todo para mejorar los estándares de vida en Occidente. Aunque hay algo de verdad en esto, hay mucha fantasía que alimenta una división global artificial.
En contraposición, está la historia que acepta lacentralidad del dominio de Occidente en la globalización, pero lo atribuye a las desagradables características relacionadas con ese proceso.
El autor argumenta que la globalización no es ni nueva ni necesariamente occidental, ni una maldición. Durante miles de años la globalización contribuyó al progreso del mundo a través de los viajes, el comercio, las migraciones, la difusión de las influenciasculturales y la diseminación del conocimiento y la comprensión (ciencia y tecnología). De los tres elementos de la civilización moderna (pólvora, imprenta y religión), China creó 2 (pólvora e imprenta), los cuales estaban asentados en todo el país oriental. Luego, la globalización los difundió a través del mundo. Del mismo modo, existió una influencia oriental sobre la matemática occidental. En...