Azatoth

"Nuestra economía, enormemente productiva, exige que hagamos del consumo nuestro estilo de vida, que convirtamos el comprar y utilizar bienes, en auténticos rituales, que busquemos nuestra satisfacción espiritual, la satisfacción del ego, en el consumir... necesitamos que se consuman cosas, se quemen, se sustituyan, y se tiren, todo ello a un ritmo cada vez más rápido".

Victor LebowAzathoth, primer motor del caos, guía la raza de consumidores consumidos

Presumiblemente el monstruo más terrible de todos es aquel que nos habita y del cual no podemos escapar. Todo intento de huida resulta vano porque ni siquiera tenemos conciencia de su presencia. La razón ignora el propósito siniestro de Azathoth, que adoptando la forma eufemística de capitalismo neoliberal nos consumecotidianamente. Vivimos los tiempos que algunos llaman posmodernidad o temerariamente fracaso de la modernidad, donde la incertidumbre, caída de los ideales de la tradición revolucionaria francesa, libertad igualdad y fraternidad se han transformado en formas sublimes de consumo. Somos ante todo una sociedad de consumo. La pérdida de identidad pone en cuestionamiento quienes somos, si somos ciudadanos,sujetos de derechos, miembros de una familia y comunidad, pero sin duda somos consumidores consumidos en acto y en potencia. La mano invisible nos guía valiéndose de todo, primordialmente de nuestro capital emocional donde nuestro valor como sujetos y expectativa de felicidad reside en nuestra capacidad de consumo. Ante ello, la Cultura del Cuidado Emocional es la única alternativa para convertir anuestro favor la tiranía de este dios bestial.

En la década de los ciencuentas, en pleno auge de la guerra fría, el consejo de asesores económicos del presidente Eisenhower declaró: "el propósito último de la economía americana debe ser el producir más bienes de consumo." No, como pudiera pensarse de un gobierno que procura sus ciudasdanos, una mejor atención sanitaria, educación, vivienda,transporte, ocio, o menos pobreza y hambre, sino abastecer de más y más cosas a los consumidores.

Cuando las cosas se diseñan para que estén bien hechas, y sean duraderas, llega un momento en que los mercados se saturan. Para lograr un mercado sin fin se introduce la obsolescencia rápida (pensemos en coches, ropa, ordenadores...) Y con lo desechable, cuando un artículo se usa una vez y se tira,el mercado nunca alcanzará la saturación.
Cual adictos al crack los sujetos están fijados en un circuito de consumo que va de la compra para producirse un placer momentáneo que al agotarse produce un vacío subjetivo que sólo es parcialmente resuelto por la ilusión de una nueva compra. El nuevo modelo de celular que tiene línea directa con dios y que nos permite ver la telvisión mientras tomamosfotos y navegamos por Internet al ritmo de la canción de moda en formato mp3.
En estos tiempos de manifiesta violencia a lo largo y ancho del país, donde cotidianamente hay muertos, descabezados, secuestrados y toda una gama de víctimas donde la mayoría son los aterrados y horrorizados que siguiendo la predica de Bush después del 11 de septiembre, la mejor solución para el terrorismo es consumir,consumamos todos, compremos todo lo que podamos y tendremos paz… algún día. Desde los tiempos de la posguerra bajo el mandato de Eisenhower
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Azathoth es un Dios Primigenio ideado por Howard Phillips Lovecraft que aparece en su ciclo de relatos denominado Los Mitos de Cthulhu.
Azathoth en el centro del vacío final
Según los relatos de literatura de terror y ciencia ficción, Azathoth es el primer motor del caos, la antitesis de la creación, el necio sultán de los demonios; el que roe, gime y babea en el centro del vacío...