Barras Bravas

La preocupación por la violencia juvenil en el mundo, así como sus múltiples formas de representación, ha llevado a Francisco Ferrándiz y Carles Feixa a afrontar por medio del presente libro, las diferentes expresiones de la violencia desde una perspectiva transcultural.
Esta excelente obra enmarcada dentro de la disciplina antropológica, refleja el esfuerzo de sus autores por querer acercar allector artículos publicados en revistas académicas internacionales de difícil acceso, complementados con textos inéditos de gran relevancia. Un gran trabajo que recoge las diferentes expresiones de la violencia: bélica, guerrillera, terrorista, política, cotidiana, deportiva, ritual y mediática, entre sus artículos.
Los autores que colaboran con sus trabajos sumergen al lector dentro de unrecorrido geográfico que tiene la intención de registrar etnográficamente tanto las expresiones de la violencia que están íntimamente relacionadas con conflictos de poder (políticas de la violencia), como aquellas que reflejan identidades colectivas (culturas de la violencia). Philippe Bourgois abre los estudios relacionados con las políticas de la violencia documentando las formas en que se resiste osostiene las desigualdades de poder. Para ello analiza las expresiones de la violencia en dos escenarios diferentes, El Salvador rural y el Harlem Este. Julie Peteet muestra a través de su trabajo con jóvenes palestinos que la violencia puede tener significados totalmente opuestos. Por un lado es utilizada para controlar y deshonrar, por otro lado como forma de resistencia que refleja heroísmo,masculinidad y liderazgo. Nancy Scheper-Hughes refleja la violencia ejercida sobre los jóvenes leones sudafricanos con la esperanza de que su heroísmo sea reconocido. Larissa Lomnitz habla de los diferentes usos del miedo a través de las pandillas de jóvenes porros mejicanos. Por último, Joseba Zulaika muestra la historia de Carlos y Martín, dos amigos pertenecientes a facciones opuestas que fueronvíctimas de la violencia vasca.
Con el trabajo de Loïc Wacquant sobre los diferentes significados que una sala de boxeo genera en aquellos que acuden a ella, comienzan los estudios relacionados con las culturas de la violencia. José Fernando Serrano trata la asociación entre violencia y jóvenes colombianos y muestra cómo ésta se ha convertido en parte de la vida cotidiana. Humberto Abarca yMauricio Sepúlveda hablan de las expresiones de la violencia de las barras bravas en los estadios de fútbol chilenos. Francisco Ferrándiz refleja las formas de violencia ejercidas y sufridas por jóvenes espiritistas venezolanos. En último lugar, Jeffrey S.Juris habla sobre la violencia representada por jóvenes activistas antiglobalización, el Black Bloc y los medios de comunicación a partir de su trabajode campo realizado en Génova.
Sin lugar a dudas, nos encontramos ante un libro que refleja el valioso esfuerzo de los autores por abrir las puertas a estudios que ofrezcan una nueva mirada de la violencia juvenil contemporánea que tenga en cuenta al objeto de estudio tanto en el espacio como en el tiempo, así como también sus expresiones más cotidianas. Un libro que no deja indiferente, ya que através de su lectura el lector siente las satisfacción de saberse más consciente de la

El fútbol ha sido desde sus principios, una gran pasión para muchas personas en el mundo, las cuales se reúnen para apoyar a su equipo de preferencia. Desde los primeros mundiales se vio la sorprendente acogida que estaba teniendo este deporte, el cual llevaba multitudes de personas a disfrutar en losestadios de los partidos de su equipo nacional u otro equipo de su preferencia, y a su vez, este podría tomarse como un espectáculo que podía hacer que la gente se olvidara por un momento de los problemas que los agobiaban en esos tiempos. El fútbol trajo consigo la competitividad y emoción, sentimientos normales en este deporte, pero lo que nunca quiso traer fue la violencia, que ha sido provocada...