Cantar Primero: El Destierro Del Cid

dEl Cid reúne a sus sirvientes y éstos se destierran con él. Mandó a buscar familiares y vasallos, a los cuales les contó cómo el Rey le ordenó salir de sus tierras, que le dio un plazo de 9 días y quería saber quien lo acompañaba y quién se quedaba.
Cid: ̶ Que Dios les pague a aquellos que me acompañan, y los que desean quedarse quiero despedirlos como amigos.
Álvar Fáñez: ̶ Contigo iremos,Cid, por cualquier camino, jamás te haremos falta mientras estemos sanos, contigo compartiremos caballos y yeguas, los deberes y la ropa, siempre te serviremos como leales vasallos.
Todos acataron las palabras de don Álvaro, mio Cid agradeció todas las palabras que se dijeron…
Mio Cid salió de Vivar para ir a Burgos, deshabitando y abandonando sus palacios. De sus ojos salieron lágrimas alvoltear y mirarlos por última vez.

Cid: ̶ *Suspira* ¡Alabado seas, señor padre, que estás en lo alto!... Esto han tramado mis injustos enemigos.

Presagios en el camino de burgos. A la salida de Vivar tuvieron la corneja al lado derecho, entrando a Burgos, éste cambió al lado izquierdo.

Cid: ̶ (Moviendo los hombros y sacudiendo la cabeza) ¡Buenas nuevas, Álvar Fáñez, porque somos echados denuestras tierras! Pero con gran honra regresamos a Castilla.

El Cid entra en Burgos, con el van 60 estandartes, salían a verlo hombres y mujeres, llorando por su dolor tan grande.

Gente: ̶ ¡Dios, que buen vasallo, si tuviese un buen señor!

Nadie hospeda al Cid, sólo le habla una niña para mandarle alejarse. El Cid se ve obligado a acampar fuera, en la Glera. A Burgos llegó carta del ReyAlfonso, el cual ordenaba que nadie diera posada al Cid.

Niña: ̶ Oh Campeador, el rey prohibió que os diéramos posada, anoche llego una carta suya, con prevenciones severas y autorizada con su sello. No debemos abrirte la puerta ni acogerte, porque lo perderíamos todo! Hasta nuestras casas, y además nos sacarían los ojos de la cara....! Id pues, con Dios y todos sus santos...

MartínAntolínez llega de Burgos con provisiones para el Cid.

Martín Antolínez: ̶ ¡Oh campeador, descansemos esta noche y partamos al amanecer, pues seguramente me acusarán por el servicio que acabo de hacer, y la ira del Rey Alfonso caerá sobre mí.

El Engaño, Martín va en busca de los Judíos a los cuales engañará para conseguir 600 marcos.

Cid: ̶ Martín, has de saber que no me queda nada, y hay cosasque debo darle a esta gente que me acompaña... Cosas que tendré que conseguir a la fuerza.
Martín Antolínez: ¿Qué ha planeado usted?
Cid: ̶ Trae 2 arcas y llénalas de arena para que pesen
Martín A. : ̶ Cubiertas de cuero y con clavos de oro?
Cid: ̶ Si, ve a buscar a Raquel y Vidas, los judíos, ofrece éstas arcas a ellos y consigue dinero, solo tú eres lo suficientemente astuto parahacerlo.
Martín regresa a Burgos, entra en la tienda de los judíos.
Martín: ̶ ¿Dónde están, Raquel y Vidas, mis grandes y viejos amigos? He de hablarles en secreto a los dos.
Vidas: ̶ ¿Que pasa, querido hermano?

Martín: ̶ Vengo a hacerles una propuesta, quiero hacerlos ricos para siempre, jamás volverán a sentirse necesitados. El Cid Campeador, que ustedes saben, ha sido desterrado por el ReyPoncho. Se vio obligado a abandonar casas y palacios, pero aún conserva lo que él considera más importante, en 2 arcas de madera llenas de oro, las cuales él desea empeñar con ustedes a cambio de lo justo, lo justo por mantener a salvo sus riquezas.
Raquel: ̶ Y qué cantidad desea el Campeador?
Martín: ̶ mio Cid Ruy Díaz necesita seiscientos marcos.
Raquel y Vidas: ̶ Con gusto se losdaremos.
Martín: ̶ Ya ven que el Cid está apurado, necesitamos el dinero cuanto antes.
Vidas: : ̶ Nonononono, así no se hacen los negocios, sino tomando primero y dando después.
Martín: ̶ Está bien, venid ambos ante el Campeador Ilustre y les ayudaremos a traer las arcas y dejarlas aqui, donde ustedes se encargaran de que nadie sepa.
Los 3 montan a caballo con rumbo al campamento del Cid,...