Civil 2

Competitividad: Una obsesión peligrosa
Resumen
La retórica de la competitividad se ha extendido entre los líderes de opinión en todo el mundo. Las personas que creen ser sofisticadas sobre el tema dan por descontado el hecho que el problema económico – asociado a la productividad – que enfrenta cualquier nación moderna es esencialmente el de competir en los mercados mundiales y son conscientesde que nadie puede cuestionar seriamente esa propuesta, sin cierto grado de dificultad.
Tres puntos sobre la competitividad se deben examinar. En primer lugar, se argumenta que la preocupación por la competitividad, es una cuestión empírica, casi por completo de fundamento. En segundo lugar, se realiza un intento para explicar por qué definir el problema económico como de competenciainternacional es tan atractivo para tanta gente. Por último, se argumenta que la obsesión por la competitividad a nivel país, no sólo puede ser errónea sino peligrosa, sesgando las políticas nacionales y amenazando la interacción e interconexión con el sistema económico tanto bilateral como multilateral. Desde la perspectiva de las políticas públicas, pensar en función de competitividad conduce, directa eindirectamente, a malas políticas económicas en una amplia gama de cuestiones, ya sea, como en Colombia (período Álvaro Uribe) con el otorgamiento excesivo de zonas francas, afectando seriamente la tributación y el comercio como un todo.
La hipótesis es INCORRECTA
Se viene dando en Colombia un recurrente debate, sobre el problema sostenido para unos y creciente para otros respecto del desempleo y/osub-empleo (que es una forma aberrada de interpretarlo). La mayoría de los férreos analistas comparten más o menos el mismo diagnóstico del problema: los impuestos y las regulaciones impuestas han hecho que los empleadores sean reticentes a crear nuevos puestos de trabajo, mientras que el nivel relativamente generoso y cuasi indigno al lograr un empleo, ha hecho que los trabajadores dispuestos aaceptarlos con bajos salarios, sin prestaciones y a corto plazo; ayuden a mantener el índice “oficial” de desempleo estable y hacia la baja.
Es un diagnóstico sobre una fórmula funcional y convincente, pero políticamente explosiva y todo Colombia querrá ver cómo se desarrolla. Hasta ahora gravitamos en la explicación macro que la causa raíz del desempleo en Colombia es la falta de competitividadcon los regionales y más dramático aun si se toma en cuenta a Estados Unidos, Japón y otros; y que la solución esencial, al margen de la educación, es un programa de inversión en infraestructura y alta tecnología. En esta postura subyacen todas las formas de corrupción que salpican las tres esferas gubernamentales: local, regional y nacional.
Es una evasión decepcionante, pero no sorprende.Después de todo, la retórica de la competitividad respecto de que cada nación es “como una gran corporación que compiten en el mercado global.” – Se ha extendido entre los líderes de opinión. De nuevo, las personas que creen dominar el tema dan por sentado que el problema económico que enfrenta cualquier nación moderna es esencialmente el de competir en los mercados mundiales – que Colombia, EstadosUnidos y Japón son competidores en el mismo sentido que la Coca-Cola compite con Pepsi y son conscientes de que nadie puede cuestionar seriamente esa propuesta, sin cierto grado de dificultad.
Cada pocos meses un nuevo artículo, libro o blog, advierte de las terribles consecuencias de perder nuestra “carrera” en el siglo XXI. Un Sistema Nacional de Competitividad (SNC), analistas, editorialistas,geo-economistas, en fin teóricos de nuestro futuro, han surgido. Muchas de estas personas, después de haber diagnosticado nuestros problemas económicos, se encuentran ahora en los niveles más altos de la administración, la formulación de políticas económicas y comerciales.
Desafortunadamente, sus diagnósticos fueron engañosos. La idea de que la fortuna económica de un país depende en gran medida...