CONVENTO DE LAS DOMINICAS LOUIS KAHN

Leyendo “una arquitectura”
en el Convento de las
Hermanas Dominicas.

Alguna vez le escuche a mi padre dando respuesta al crucigrama del
día, el cual le cuestionaba en una
de sus preguntas, sobre el término
usado en música para leer
partituras- una historia sobre un
director de orquesta, al que le
preguntaba uno de sus músicos que
si oía mucha música. A lo que él
respondió, que lo hacía comocualquier persona del común, de
manera
aficionada, sin
pretensiones ni filosofías. Pero que al
contrario leía mucha música.
Enseguida imagine, que al hacerlo
los sonidos venían a él; las corcheas,
las negras
y las blancas
encadenadas pero al mismo
tiempo siendo organizadas por el
pentagrama entrando a su cabeza.
Algo análogo sucede con los planos
de arquitectura, cuando una
persona acostumbrada ahacerlo
los observa, aparecen en el aire la
imagen construida, los espacios, los
recorridos pero principalmente la
planta, el elemento organizador por
excelencia.
Entre todos los tipos de planos, las
plantas asaltan un lugar central en
la percepción de una obra. Nos
ofrecen “una” explicación rápida
del mismo, la cual dilucida la
intención esencial o primigenia del
proyecto. Aquellas bien logradasejercen sobre mí una extraña
fascinación, tal como una fórmula
elegante la ejerce sobre un
matemático. Estas detallan su
ubicación en el terreno y la
distribución interna de los recintos;
pero sin fachadas y, sobre todo, sin
secciones, son insuficientes para
entender bien una edificación.
A mi manera de ver
existen
notables proyectos de arquitectura
cuyas plantas son excepcionales y
viceversa. Porejemplo las plantas
de la Casa Gilardi (Ciudad de
México, 1976 - 80) de Luis Barragán
no dan cuenta de la emoción que
produce encontrar en esos

recorridos el matiz espacial
producido por el color, la luz y la
sombra en la casa, como si lo
alcanza a entrever una fotografía.
Por el contrario, la extraordinaria
planta de la Capilla de Ronchamp
(Ronchamp, Francia, 1954) de Le
Corbusier, permite entendercomo
en el grosor del lápiz, y su fuerte
intensidad, nacen esos maravillosos
muros sinuosos y la sombra de esa
nave que se posa sobre ellos. Pero
generalmente, los resultados
coinciden.

en dos cuadrados de madera
girados en 45º, los cuales colisionan
violentamente. Las circulaciones se
reducen a un mínimo y la casa es
insólitamente compacta y
abstracta. La planta de doble altura
aloja el estar -comedor - cocina. La
otra los dormitorios. Para una mente
tan analítica como la de Kahn, el
giro debía tener una explicación
racional: el estar es paralelo a la

Todos los grandes arquitectos
modernos crearon bellas plantas
paralelamente que producían
hermosos edificios. Apartándose de
la tradición, descubrieron
procedimientos paradigmáticos
para adecuarse a distintos lugares y
programas. Peromuchas de sus
propuestas dieron origen a un
hecho contradictorio. Tal es el
atractivo y flexibilidad de varias de
dichas plantas, que éstas se
volvieron válidas para otros lugares y
programas. Establecieron tipologías
modernas posibles de desarrollar,
con las variaciones del caso, por
ellos u otros. Dichas plantas
adquirieron valor por sí mismas.
Es este sentido, el que quiero
rescatar; analizandounos de los
proyectos no construidos, más
importante del siglo pasado, el
Convento de
las Hermanas
Dominicas en Media, (Penn., U.S.A.,
1965 - 68), de Louis kahn, ya que en
su planta encontramos el alma de su
obra. En Este proyecto vemos
intrínsecamente como con la
planta, únicamente, se puede dar
cuenta de un arquitecto, de un rito,
y en especial de un momento en el
tiempo; que al igual que elpentagrama en la música nos deja
leer “una arquitectura”.
Al ver la planta de este proyecto
puedo asegurar sin titubeos que
debe su origen a dos proyectos en
específico; el edificio de la CEPAL,
diseñada por Emilio Duhart en
Santiago de Chile (1960 - 64), que
curiosamente fue diseñado un año
antes al primer bosquejo del
convento; y por otra parte , una
modesta casa diseñada por el
mismo khan en...