Cornejo Niguel
¡Descansa en paz, que nosotros también!
La viuda lloraba inconsolablemente a quien fuera su compañero durante los últimos 30 años,y de quien no pasó día sin quejarse por su comportamiento, y no solamente una vez pensó: “Mejor sería que estuviera muerto”. Al final el pensamiento inconfesable, “¡se le cumplió!”: Se murió.
Apartir de ese momento para orgullo de la viuda sus cualidades surgieron y como por arte de magia sus errores desaparecieron.
¡En vida hermano, en vida! Dice mi amiga Ana María Rabatté, ¿por qué nohacer la lista del vivo y no esperar que se muera para decírselo?
Para desarrollar a un ser humano no hay que atacar sus limitaciones, sino más bien ponderar sus potencialidades, reforzar suscualidades no sus defectos.
Si de verdad amamos debemos ocuparnos en hacerlo crecer, enriquecerlo, hacer del ser humano un ser superior y no empeñarnos en empobrecerlo, degradarlo y humillarlo.
Siauténticamente le amas, demuéstraselo enriqueciéndolo, en hacer del otro, el ser que debe llegar a ser.
El amor debe siempre enriquecer, cuando destruye deja de existir.
“¡En vida hermano, en vida!”¿A quién Amas?
¿A quién amas? ¿Al que es o al que deseas que sea?
¿A quién amas? ¿A un ser real o alguien que produjo tu fantasía?
¿A quién amas? ¿A un ser perfecto o alguien tan realcomo tú, con potencialidades y limitaciones?
¿A quién amas? ¿A una persona que todos los días le recriminas su actuar o quien aceptas con fallos y aciertos?
¿A quién amas? ¿A un ser que lo puedesabandonar porque no lo soportas o alguien que día a día puede acompañarte en la aventura diaria de vivir?
Pregúntate, ¿a quién amas? y decide aceptarlo así como es, y si no es así deja ya de...
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