Crisis Bicentenario Ii

SEGUNDA PARTE
El comandante en jefe de la Armada, almirante Maximiliano Vial Fuentes, aprovecha además de informar que navegan hacia el norte los transportes Valdivia, Rancagua, Chacabuco y Aquiles, que llevan al destacamento de infantería de marina No 2 “Miller”, junto con una fuerza de apoyo de 12 tanques livianos Scorpion que servirán para complementar a los Leopards si es que se presentaalgún combate de blindados en el desierto. Toda esta fuerza llegará a Antofagasta en 2 días. -Los transportes van escoltados en todo momento por el buque madre de submarinos “Merino”, por aviones de exploración Persuader, los cuales van armados con misiles antibuque y por los submarinos Thomson y Simpson.-Es decir- puntualiza el ministro – ¿Que no ocurrirá lo de la guerra del Pacifico, cuando elHuascar nos capturó un transporte que llevaba un regimiento de caballería al norte?-No sr. Ministro. Hoy, esos transportes van con escolta.-Bien me parece. Si ocurriera un desastre la oposición podría intentar sacar provecho político y eso el presidente Insulza no lo quiere. Y deseo, señores generales y almirante, que una cosa quede claramente establecida. No se emprenderán operaciones de importanciasin haber consultado antes previamente conmigo. ¿Entendieron bien?-Si, sr. Ministro-, responden quedadamente algunos de los presentes. -Bien. Mañana habrá otra reunión, pero con una particularidad. Asistirá Su Excelencia y…-Sr. Ministro.- Zaldivar mira, contrariado, hacia donde esta el hombre que lo interrumpe. –En definitiva, ¿Qué pasará con los defensores de Putre?-Ya expliqué que no podemosmandar tropas en su auxilio, general Ward Leighton- responde el ministro al comandante en jefe de la FACH. –Ud. preocúpese de cuidar sus aviones, que harto caro que salió comprarlos.-Es decir, los condenamos a muerte- dice Ward. -¡No, general! No podemos darnos el lujo de perder soldados profesionales en una operación que no tiene destino. Si tuviéramos suficientes fuerzas, y sobre todo, suficientesaviones de transporte, podríamos reforzarlos y quizá, intentar un ataque contra Arica desde el Este. Pero por el momento, solo tenemos la iniciativa en el mar y en el aire. En tierra, estamos limitados al numero de soldados, que por ahora, son insuficientes para retomar Arica. Solo tenemos fuerzas para defender Iquique y Antofagasta, no para montar una ofensiva. Además, dudo que puedan aguantar pormás de dos días. ¿Entendió bien, general? -Claramente, ministro, claramente.- responde con cierta ironía el general Ward. Pasando por alto el desaire a su cargo, Zaldivar retoma su explicación: -Compréndanlo, como ministro, mi deber es cuidar los limitados recursos de que disponemos. Nuestras armas son las mejores de Sudamérica, pero al mismo tiempo son las más caras. No podemos perder plata enoperaciones que no tienen posibilidad de ganarse. En la reunión de mañana estarán además algunos ministros. El lugar donde se llevará cabo se les avisará con dos horas de antelación, así que estén ubicables. Es todo, se levanta la sesión.-

Mientras se dirige a su automóvil, el ministro, bastante enojado, conversa con su jefe de gabinete: -Ward se va a retiro antes de una semana. Como que hayDios que Ward se va a retiro antes de una semana. Hable con el subsecretario de Aviación para que se encargue de eso.Al mismo tiempo, los 3 comandantes en jefe abandonan juntos el edificio de las Fuerzas Armadas. En los momentos en que esperan el ascensor, el comandante en jefe del Ejercito, general Sergio Irureta Aguirre, se dirige al general Ward: - Gracias por tu preocupación hacia mi gente enPutre, Fernando, pero, huevón, te cocinaste ahí adentro.-No te preocupes, Sergio. Yo voy a renunciar antes de que me pasen a retiro, pero no me voy a ir sin antes hacer una declaración de principios.-¿Y nos puedes dar un adelanto de esa declaración?- pregunta el almirante Vial. -Voy ahora mismo a redactarla. Me dirijo a la base El Bosque, a conversar con el jefe del Comando de Combate, mi buen...