¡Cuán bello es retoñar!

¡Cuán bello es retoñar!

Una de las actividades más antiguas que el hombre ha realizado es el cultivo de plantas. En el libro del Génesis encontramos que Dios dio al hombre “toda planta que dasemilla, que está sobre la tierra” para comer y lo colocó en el huerto del Edén para que lo labrara y lo guardara (Génesis 1:29; 2:15).
Una práctica imprescindible en la horticultura es la poda de lasplantas, es decir, la acción de cortar o quitar ciertas ramas de los árboles, como las vides u otras plantas, para que después se desarrollen con más vigor1. De acuerdo a los expertos, la poda es laacción apropiada para asegurar que la planta será capaz de tener la máxima producción de frutos cuando venga la temporada para ello. Y es que una de las razones más importantes por la cual se debe podarlos árboles es el hecho de que ésta sirve para mejorar las condiciones de crecimiento de la planta. Esta técnica permitirá que la planta produzca mucho más fruto que el año anterior2.
En elcapítulo 15 del evangelio de Juan el Señor Jesucristo se compara a sí mismo con una vid:

“Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquelque lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto” (Juan 15:1-2).

No transcurre mucho tiempo en la vida de un creyente antes de que éste compruebe la realidad de esta declaración. El Señor,en su amor y sabiduría, trae temporadas de poda a nuestras vidas con cierta frecuencia. Para cada creyente serán distintas, pero es seguro que todo hijo de Dios, tarde o temprano se encontrará en mediode una de ellas. De eso no hay ninguna duda pues todo creyente está conectado con la vid y dando frutos, por lo que el Padre lo podará para que dé aún una mayor cantidad.
Y al igual que ocurre conuna vid, el momento no es agradable. Sentimos que la temporada de florecimiento nunca va a llegar e incluso llegamos a preguntarnos por qué el Labrador ha sido tan cruel con nosotros. Sin embargo,...