DEBERES EMERGENTES DE LA RELACI N M DICO

DEBERES EMERGENTES DE LA RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE
1. Deberes a cargo del médico y del paciente
Desentrañada por la doctrina la naturaleza jurídica de la relación -contractual como regla- y producida su calificación, locación de servicios o de obra -y su integración-, con los efectos dispuestos por ley, las partes y, en su caso, las costumbres (art. 17, Cód. Civ.), corresponde que en el presentecapítulo nos detengamos en los deberes jurídicos nacidos de esa relación [1]. 
Es corriente la afirmación acerca de los deberes emergentes de un contrato oneroso: tales deberes pesan sobre el acreedor de la contraprestación dineraria. Es un contrato de cambio: prestación de hacer por dinero. El médico se obliga a la atención del paciente (resultado inmediato), con todo el "paquete" de deberes queello entraña, y el paciente se obliga al pago de los honorarios. 
Empero, una visión semejante, simplificadora, deja de lado el deber de "cooperación" que le atañe al acreedor, destinado a hacer posible el cumplimiento de la prestación del deudor; en el contrato médicopaciente y en la relación que él engendra, dadas la complejidad del servicio médico y su realización "sobre" el cuerpo o la psiquisdel enfermo, dicha colaboración tiene grandísima importancia. 
De ahí que titulemos al capítulo "deberes", en plural: porque el médico no es sujeto pasivo de sólo un deber, sino de un "ramillete" o "paquete" de deberes, y porque también el paciente tiene que cumplir con determinadas conductas, que posibiliten, faciliten o aseguren el éxito de la prestación a cargo del profesional.

2. Deberesanteriores al tratamiento o intervención quirúrgica. Concomitantes y posteriores
Los deberes del médico, nacida la relación, se sitúan en tres momentos: antes de comenzar su "tratamiento" o "intervención", durante la realización de ella y después de concluida. 
Va implícito que la atención médica debe llevarse a cabo de acuerdo con las reglas del arte y de la ciencia médica; de conformidad con losconocimientos que el estado actual de la medicina suministra, con la finalidad de obtener la curación del paciente; observando el mayor cuidado, diligencia y previsión, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento. 
Nos hemos ocupado ya del deber del médico de escuchar al paciente, de someterlo a interrogatorios a fin de averiguar la etiología de su mal, de precisar su dolencia; correlativo deldeber del paciente de brindar al médico todos los datos que puedan serle de interés a esos fines, útiles para la formación de la historia clínica [2]. 
El respeto a tales deberes, que debe darse en todos los casos, es de máxima exigencia cuando el enfermo presenta un cuadro polimorfo en sus síntomas y signos, que haga difícil el diagnóstico, obligando a emitir únicamente diagnósticos presuntivos. En tales circunstancias deben extremarse los medios para llegar a formular un diagnóstico cierto. Deben agotarse los análisis y demás recursos de la medicina actual. Empero no es suficiente su solicitación; es precisa su realización en tiempo oportuno -sin dilaciones o demoras inútiles- y su posterior estudio por el médico. 
En esta etapa suelen aparecer las reacciones inmunológicas o alérgicas adrogas, las cuales muestran un gran polimorfismo de síntomas y que abarca prácticamente todos los tejidos y órganos. Pues bien, la responsabilidad médica puede nacer tanto de la omisión de las diligencias necesarias para evitar la reacción inmunológica como, también, en momentos posteriores, por haber actuado con impericia en la neutralización de sus efectos [3]. 
Ahora bien, las pruebas mucosas,intradérmicas o parches, para detectar la posible alergia a antibióticos, ¿son habituales, deben realizarse en todos los casos, o sólo si el paciente denuncia el factor alérgico? Tenemos aquí planteada la problemática de la colaboración. La no denuncia, ¿autorizaría al médico a prescindir de tales pruebas sin responsabilidad? Quede claro que no se trata de hacer pruebas de sensibilidad con todas...