delo que sea

 Crónica de una muerte anunciada
El día en que iban a matar a Santiago Nasar, se levanto alas 5:30 de la mañana, para esperar el bunque en el quellegaba el obispo, había soñaba que atravesaba un bosque de higuerones donde caía una llovizna tierna, por un instante fue feliz en el sueño, pero al despertar se sintió por completo salpicado decagada de pájaros. “siempre soñaba con arboles” me conto placida linero, su madre, evocando 27 años después de los pormenores de aquel lunes ingrato.
Las muchas personas muchas personas que se encontródesde que salió de su casa alas 6:05 hasta que fue destazado como un cerdo una hora después lo recordaban un poco soñoliento pero de buen humor, y a todas le comento de un modo casual que era un díamuy hermoso. Yo estaba reponiéndome de la parranda se la boda en el regazo apostólico de maría alejandrina cervantes, y apenas desperté con el alboroto de las campanas tocando arrebato, porque penséque las había soltados en honor del obispo.
Santiago nasar se puso un pantalón y una camisa se lino blanco, ambas piezas sin almidón, iguales alas que se había puesto el día anterior para la boda.
Yolo sabia, y sabia además que guardaba las armas en un lugar y escondía la munición en otro lugar muy apartado, de modo que nadie cediera ni por casualidad ala tentación de cárgalas dentro de lacasa.
De su padre aprendió desde muy pequeño el dominio de las armas de fuego, el amor por los caballos y la maestranza de las aves de presas altas pero de el aprendió también la buenas artes del valory la prudencia. Hablan en árabe entre ellos pero no delante de placida linero para que no cesintiera excluida.
No le había causado ningún alivio.
Había estado de parranda con Santiago nasar yconmigo hasta un poco antes de las cuatro pero no había ido a dormir donde sus padres sino que se quedo conversando en casa de sus a vuelos.
Pensó una vez mas en la buena suerte de flora miguel que tenia...