Derecho romano fes acatlan

OPÚSCULO SOBRE EL GOBIERNO DE LOS PRÍNCIPES

CAPÍTULO III
CÓMO EL GOBIERNO DE UNO ES EL MEJOR, CUANDO
ES JUSTO, ASÍ CUANDO ES INJUSTO ES EL PEOR
Así como el régimen de un rey es el mejor, así el de un tirano es el
peor. Pues se oponen la república a la democracia, aun cuando ambos
sean, como sea dicho, regímenes en manos de la muchedumbre; la
aristocracia a la oligarquía, ambas ejercidaspor unos pocos; y el reino y
la tiranía, ambos tipos de gobierno en manos de uno solo. Ya hemos
explicado que el reino de uno solo es el mejor. Si pues a lo mejor se
opone lo peor, sigúese que el peor régimen sea la tiranía.
La fuerza unida es más eficaz para producir un efecto que dispersa. Pues muchos unidos pueden arrastrar aquello que no podrían si
estuviesen divididos por partes. Y asícomo es más útil la fuerza que
obra el bien, mientras más unificada está, del mismo modo es más
nociva si está unificada la fuerza para el mal, que si está dividida. Y la
fuerza de un gobernante injusto busca el mal de la multitud, cuando
vuelve hacia su propio bien aquello que debía ser para el bien común.
Dijimos que en un régimen justo, cuanto más unido está el gobernante
es más útil alrégimen, de modo que es más útil el reino que la aristocracia,
y la aristocracia que la república; así será todo lo contrario en un régimen
injusto: mientras más unificado esté el régimen será más perjudicial.
Por tanto es peor la tiranía que la oligarquía, y la oligarquía que la
democracia.
Más aún, el régimen se convierte en injusto cuando, despreciando
el bien de la comunidad, el rey buscasólo su bien particular. Por tanto
mientras más se aparta del bien común, tanto peor será un régimen.
Por tanto la oligarquía se aparta más del bien común, porque reduce
el bien a unos pocos, que la democracia, que busca el bien de muchos.
Y mucho más se aparta del bien común la tiranía, pues sólo busca ti
hiende uno. Pues en todo conjunto, la multitud está más cerca de la
universalidad queunos pocos, y unos pocos lo estarán más que uno
solo; de ahí que el régimen tiránico sea el más injusto. Lo mismo aparecerá si consideramos el orden por el que la divina providencia todo lo
dispone de manera maravillosa. Pues el bien proviene de una causa
perfecta, en cualquier cosa en que lo encontremos, en la cuál se unifican todas aquellas perfecciones, que pueden ayudar al bien; en cambio lomalo procede de cualquier defecto singular. Pues no se da la
hermosura en un cuerpo, si no están bien dispuestos todos los miembros; en cambio se ve feo cuando un solo miembro está fuera de lugar.
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Así, pues, lo feo puede provenir de una u otra causa; en cambio lo
bello, de la unión de todas las causas para formar una perfecta. Y así
sucede en todo lo bueno y lo malo según elorden de la providencia;
pues el bien que procede de una causa es más fuerte, en cambio el mal
que procede de muchas causas es el más débil. Por tanto conviene que
el mejor régimen provenga de uno, para que sea así más fuerte. En cambio
si se da un régimen injusto, es mejor que esté en manos de todos para
que así se impidan el mal mutuamente. Entre los regímenes injustos el
mejor es lademocracia, y el peor la tiranía.
Lo mismo se deduce si se consideran los males que han venido de las
tiranías; porque cuando el tirano, despreciando el bien común busca
el privado, es lógico que sea gravoso a sus subditos de diversas maneras,
según se lo dicten su pasiones, para satisfacer éste o aquel deseo. Pues
quien se deja llevar por la pasión de la codicia, roba los bienes de los subditos. Poreso dice Salomón: "El rey justo construye la tierra; el codicioso la
destruirá" (Prov. 29,4). Si se deja llevar por la ira, derramará la sangre con
cualquier pretexto, como dice Ezequiel: "Sus príncipes, como lobos rapaces para derramar la sangre de la presa" (22, 27). Y el sabio nos dice que
hemos de huir de tal tipo de régimen: "Retírate del hombre que tiene el
poder para matar" (Ecl. 9,...