Derechos humanos conclucon
Aristóteles introduce el concepto de "entelequia", que luego tomará Kant para referirse a la obra de arte. La entelequia implica un fin intrínseco o la idea de unafinalidad sin fin. Y entendiendo el tema —desde el concepto de obra de arte acuñada por la Modernidad— significa que no hay ninguna pieza de arte que se justifique por otra. Cada obra de arte "es",porque es una unidad, no es una perfección en tanto meta, sino aquella perfección que se refiere al advenimiento de una sola cosa, acabada y formada.
Cada pieza —así entendida— es otra esencia delarte, y es cada vez todo lo que es, es decir todo el arte en sí. La obra de arte moderna implica una puntualidad estética, acto que acabado en sí conforma otra historia distinta del ritmo de "laprogresión" histórica. La obra de arte interrumpe la linealidad como proceso o como progreso. Y como luego afirmará Heidegger, resta únicamente saber si es arte o no lo es.
Viendo a la arquitectura —y porqué no también a su enseñanza dentro de esta perspectiva— hace rato que uno puede afirmar que la obra de arquitectura dejó de ser un fin en sí misma. Sus fines son otros y siempre están fuera de la obra.Y no importa que llamemos a estos fines con diferentes nombres, ya sea: utilidad (económica), historicidad, simple espectáculo o, como dice Venturi, "anuncio" de fines que están siempre más allá...
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