don quijote
—Se llama “toca y corre” —le explicó—. Tiene que tocar la puerta de alguna casa o castillo y salir corriendo para que no te vean.
—Pero, entonces van aabrir la puerta innecesariamente.
—Ese es el chiste. Es una broma.
Con don Quijote excitado e impaciente, Sancho se acercó a la puerta de una casa pequeña pero suficientemente grande paraalbergar a, como mínimo, dos o tres personas. La puerta era de madera y había una ventana clausurada a su lado. Entonces tocó la puerta, se subió torpemente rápido a su burro y cabalgó a toda velocidad.Entonces se volvió y vio a don Quijote parado en frente de la puerta, y le gritó: “¡Señor, se supone que ahora tiene que salir corriendo!” Incrédulo, don Quijote se subió a Rocinante e intentó cabalgar,pero la voz de una señora entrada en años, acompañada de un abrazo repentino y cálido, interrumpió su huída:
— ¡Don Quijote! —Exclamó emocionada la señora— ¡Acabo de reconocerlo! ¡Por poco no le abrola puerta! —Y lo invitó a pasar para tomar agua y comer pan recién horneado. Don Quijote le gritó a Sancho para que se acercara y entrara junto con él.
Una vez adentro, la señora, quien se habíapresentado como María Brizuela, les trajo dos tinajas de agua y seis pedazos de pan que ella misma había acabado de hornear. “Tomen agua —les dijo—. Debería llevar siempre agua porque si no se puedendeshidratar y morir en el camino”. Se sentaron a la mesa y comenzaron a charlar.
Mientras Sancho tragaba el pan casi sin masticar, como los patos, y tomaba el agua como barril sin fondo, doña MaríaBrizuela les comentaba acerca de porqué casi no les abrió la puerta.
—Lo que pasó es que hace dos o tres meses me golpearon la puerta —contó—. Cuando pregunté que quién era, me contestaron que era...
Regístrate para leer el documento completo.