Eduardo Mendoza - El año del diluvio
La idea inicial de esta novela se le ocurrió a raíz de su primera incursión en el mundo del teatro. Había quedado contento con la experiencia yquería escribir otra obra. En cierta manera, se sentía constreñido por la necesidad de que los protagonistas fueron pocos,decidió reducirlos a dos: una pareja de ancianos que se encuentran casualmenteen un asilo al cabo de muchos años de haber vivido una pasión fugaz. Como le solía ocurrir a nuestro autor(Eduardo Mendoza), de este punto de partida apenas quedó nada; de hecho, ni siquiera elreencuentro se produce.
Le dominaba la idea de reconstruir un período de nuestra historia más reciente,que, sin embargo, nos parece hoy increíblemente lejana. Un aniversario al que la prensa prestócierta atención(el de la muerte del último maquis) y una estancia en una abrupta zona montañosa de Cataluña estimularon su imaginación.
Las terribles inundaciones que asolaron Cataluña a finales dela década de los cincuenta le sirvieron por partida doble: cumplían la función que él quería y además ligaban el relato a un suceso histórico real, presente en la memoria colectiva y vehículo idóneo dela retórica oficialista de la época. Con todos estos ingredientes(una época agobiante, un paisaje rústico y sombrío, unos protagonistas de singular idiosincrasia, una historia de pasiones violentas yamores imposibles) lo más sensato habría sido renunciar. Pero,naturalmente, el riesgo le atrajo.
Una vez hecho acopio del material necesario, fue escribiendo y reescribiendo en busca de undifícil equilibrio: no quería caer en el melodrama pero tampoco evitarlo. Procuró sortear este peligro haciendo derivar la historia hacia el tema que a él le interesaba: el balance in extremis de una vida...
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