El barroco: Guillén de Lampart y Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, sus miradas a futuro.


UNIVERSIDAD AUTÓNOMA
DE BAJA CALIFORNIA SUR




Jesús Alejandro Angulo León

Semestre VII

Filosofía en México I (Siglo XIV-XVII)
LUIS ARTURO TORRES ROJO

Contenido:
El barroco: Guillén de Lampart y Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, sus miradas a futuro.

A diciembre del 2012

INTRODUCCIÓN

Salvar nuestra circunstancia en el siglo XXI, siendo mexicano yestudiando filosofía puede parecer un tanto pretencioso, en el sentido de que, por un lado tenemos todo un contexto cultural y por el otro toda una contraposición idealista-filosófica que se encuentra encarnada en nuestro ser; nos vemos pues casi imposibilitados a resolver y emprender tal misión. Ante un Estado casi fallido, que se encuentra sometido al capitalismo internacional y al narcotráfico, pormencionar ejemplos, nos pone un una situación de muy pocas o nulas esperanzas. Pensar en ejemplos actuales que puedan ayudar de impulso motor para “salvar” la circunstancia del mexicano es como buscar una aguja en un pajar e irremediablemente recurrimos a la historia. Ella puede ofrecernos ejemplos que demuestren que el espíritu humano ha buscado ser libre, tratando de romper las cadenas de laopresión y de la dictadura de algún pensamiento que ha querido ser ley universal destruyendo a quien se encuentre a su paso.
En el presente ensayo trato de visualizar mediante una remembranza histórica, situándome en un presente que se visualiza a futuro, a las figuras dignas del recuerdo y que nos hagan sentir responsable de nuestras circunstancias, ello debería provocar el sentido deresponsabilidad individual y colectiva. Si la filosofía, hegeliana y nietzscheana, nos enseña primero a no ser esclavos de nadie y segundo a no ser esclavos de nosotros mismos, entonces no es extraño que movimientos culturales hoy por hoy sean manifestación de ello, es el despertar del sueño que ya Demócrito insinuaba -ando entre dormidos- ya es hora entonces, de despertar en nuestro tiempo del sueño masivo alcual ya por voluntad propia nos hemos inducido. Creo Sor Juana Inés de la Cruz y Guillen de Lampart son dignos de ello, despertaron y se adelantaron en su tiempo, haciendo del barroco un medio cultural para llevarlo a lo posible.


1. El barroco: Guillén de Lampart y Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, sus miradas a futuro.

Malintzin: como presupuesto de identidad mexicana

Lapalabra "malinchismo" sugiere un término despectivo para aquellos que se les considera vende patrias y traicioneros de ella, además se adjetivan las acciones en perjuicio de la propia cultura o la preferencia por lo extranjero por el hecho de serlo. Antes la anterior definición podemos decir que es casi seguro que no fue un sentimiento de los indios derrotados y masacrados, además es muyposterior a la conquista. Aquí ha de aplicar la búsqueda de la historia de los conceptos. Bien, para entender las circunstancias de Malintzin es necesario tener muy en cuenta que la consideración de que alguien fuera traidor o vendedor de patrias, primero debería de poseer algo y segundo, no ser esclavo en su tiempo. Pero considerando aún las posibilidades de odiar a quien pueda ser traidor, la historianos dice que estaba obligada, en dado caso, a serlo, aunque trate yo de plantear todo lo contrario.
Bolivar Echeverria plantea muy inteligente y sanamente la posibilidad que en la otredad, la Malintzin, buscara salvar no sólo su circunstancia sino la de dos mundos que se contraponían en ideología, pensando en la posibilidad de un entendimiento mutuo que jamás se completo entre el mundo maya y eldel “conquistador”. Mientras, la percepción de los opuestos fue totalmente contraria a lo que ella pudiera fraguar como respuesta positiva a tal enfrentamiento de los dos mundos:
Los indígenas no podían percibir en el Otro una otredad o alteridad independiente. Una “soledad histórica”, la falta de una “experiencia con el Otro”, según la explicación materialista de Octavio Paz, había mantenido...