El Jard N Celestial

Páginas: 6 (1273 palabras) Publicado: 7 de mayo de 2015
Universidad de Costa Rica
Escuela de Estudios Generales

Comunicaciones
Tatiana Herrera

Ana Paula Bonilla
Natalia Zamora
Victoria Pérez
Daniela Venegas
Alejandro Badilla
Laura Madrigal

2015

Cuarta espiral.

Jardines íntimos y mínimos

8,5. El jardín celestial
En Mogador, con la voz del viento que cambia los rumores y secretos a
voces, cambian también las calles a paso disperso. Todos losdías, con cada
callejuela nueva creada gracias al movimiento de los puestos mercantiles;
sitios desconocidos, visiones inéditas del paisaje son concebidas, sombras
son proyectadas en el suelo con diseños variados y pueden ser visualizados
en la calle con formas únicas, de cuando en cuando simétricas, la mayoría
de veces asimétricas, pero, en ambos casos sorprendentes.
Las paredes altas, con uncontraste intenso con el cielo y las salpicadas
celosías de aquí a allá pueden representar papeles distintos debido a la
forma en la que se alinean con otros elementos de su entorno, no sólo
visuales, sino que factores como el viento, la humedad, el gusto del aire y el
olor de las mercancías podían jugar roles variados entre sí que podrían llegar
a formar un jardín efímero. Me vi tentado a incluirlo comouna de mis
búsquedas, pero a pesar de su fantástica forma, se me apetecía sencillo, y
carente de cuerpo y esencia, en extremo similar a las visiones que había
experimentado en mi paseo por Mogador junto a Jassiba.
Uno de esos secretos a voces, rumores, de aquellos que perecían en un solo
día para dejarle paso a otro, llegó a mis oídos en mi búsqueda de jardines.
Se trataba sobre la propiametamorfosis de las callejuelas, en un principio
pensé que se trataba sobre los jardines fugaces ​
que había visualizado en
variadas ocasiones, ​
experimentación de dar paso lo claro a lo oscuro, la luz a
las sombras; al final terminó en una historia distinta, con algunos puntos en
común. La mayor diferencia radicaba, quizás, en que no eran múltiples
jardines distintos dentro de varias calles, sino sóloera un solo gran supuesto
e infinito ryad que se podía observar desde variados lugares. Según el
hombre que me había hablado sobre él, el problema era hallar su génesis, la
complicada arquitectura que se rehacía día tras días y las considerables
calles y pequeñas callejuelas de un día, sumado a las enrevesadas formas de
las estructuras lo hacían difícil de hallar. Según el mercader, quizásencontrarlo no era el problema en sí, era volver, lo que le llamó, visible a los
ojos.
Un poco como como un espejismo, un poco como una ilusión. Me dediqué a
buscar sin saber qué. Allí en los pasadizos de Mogador confluye un poco de
delirio y un poco de quimera. Entre las paredes marrones, entre los azulejos
magníficos, entre los cestos de mimbre, en medio de las celosías, y detrás
de las sombrasesbozadas por los altos paredones; lo invisible hace su

magia, quizás es por ello que confluía cierta confusión, me perdí entre la
ilusión de las calles idénticas, mayormente desérticas.
Rodeado de muros, pude encontrar a un niño.
La geometría de las sombras volvía a clavarse en mis ojos entre las solitarias
calles de Mogador.
Me precipité a preguntarle sobre jardines a pesar de que albergaba misdudas, repitiendo lo dicho por el hombre aquel mismo día.
—Dos rostros. El cielo tiene dos rostros, opuestos, ocultos, pero entonces
solamente tienes que revelarlos.
Me explicó un poco acerca del cielo delimitado por aquellas enormes
estructuras que nos rodeaban, como si fuera en niño y él un ​
halaiquí​
. Hacía
parecer al cielo un río rodeado de canales, pero a pesar de ellos, libre de
aquellademarcación mundana e impotente, características que empezaban a
aflorar al contemplar de manera distinta la esfera. Al principio no llegaba a
comprender del todo a lo que se refería, pero conforme seguía hablando,
señalando y moviéndose empecé a asimilarlo y a sentirlo también.
Terminamos cerca de un muro no demasiado alto que daba al mar y de
frente al Sol, al atardecer. Los pasadizos laberínticos,...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Jard N De Ni Os
  • Jard N
  • JARD N DE NI OS
  • EL JARD N DEL ED N
  • El jard n de la alegria
  • EL JARD N NATURAL
  • Educar En El Jard N
  • El Jard N Secreto

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS