El Perdón. Una Visión Desde La Teoría Mimética De René Girard

EL PERDÓN.
UNA VISIÓN DESDE LA TEORÍA MIMÉTICA
DE RENÉ GIRARD.

“La violencia que esgrimimos contra el otro es siempre ilegítima
porque tiene su origen en reciprocidades miméticas injustificables”[1]

0. Introducción

Este trabajo pretende ser una reflexión acerca del perdón a la luz de las aportaciones de René Girard, quien nos propone sumergirnos en la ambigüedad profunda de larealidad humana con increíble lucidez y naturalidad. Él mismo afirma: “Nuestra sociedad nos obliga a multiplicar toda clase de propuestas incompatibles entre sí.” Y, sin embargo, tiene la gran habilidad de no caer en el relativismo científico y proponer con plena confianza y gran autoridad académica una interpretación antropológica de carácter universal de profundo calado y alcance. Estimo por ellooportuno tomarle como clave hermenéutica para ahondar en un tema profundamente antropológico como lo es el que nos disponemos a abordar.
Al empezar a hablar del perdón cabe recordar la larga lista de aportaciones que desde la filosofía y otras áreas se han realizado y se realizan. Sabemos que es un tema neurálgico, y que una y otra vez puede ser descubierto. Nos sirve de ejemplo lo que el mismoprofesor Josef Seifert [2] comenta acerca de su vocación filosófica, la cual nace de este hallazgo: “el perdón como objeto central de la filosofía, a saber, un mundo de leyes esenciales, completamente independiente de nuestra subjetividad, un eidos dado previamente a nuestro intelecto. En la esencia del perdón encontré algo absolutamente objetivo, que es descubierto y que, al mismo tiempo poseeuna perfección ideal que es infinitamente difícil de realizar en la vida…”[3]
Considero también que esta reflexión puede servirnos para identificar y ahondar en los procesos que falsean el perdón, de manera que se pueda vigorizar su valor como vía de desarrollo humano. Además, es posible que a la luz de un estudio sobre el perdón como capacidad y cualidad profundamente humana, puedan revisarsecontenidos educativos entorno al respeto, la solidaridad, la tolerancia, la libertad,… aportándonos un rumbo más acertado en nuestros esfuerzos por construir una sociedad más feliz, capaz de apuntar con más nitidez en su manera de comprometerse con la verdad, viviendo y proponiendo el perdón como vía de desarrollo humano, individual y social.

1. El perdón en el marco de los derechos humanosEmpecemos por recordar lo que Girard dice acerca de la moderna preocupación por las víctimas.[4]
Girard habla del hecho de que nuestra sociedad es la más consciente de sus errores y la que más se auto condena por ello. Pero este reconocimiento de “culpabilidad” tiene sus ambigüedades: ni más culpables que otros momentos de la historia, ni realmente tan preocupados por las víctimas como creemosestarlo. Seguimos, inconscientemente, invadidos por nuestras rivalidades miméticas y este tema es, de manera novedosa, una moneda de cambio. Sin embargo, no podemos negar que también hemos avanzado en humanidad. ¿Cuál es la raíz de este avance? ¿Dónde empieza nuestra moderna preocupación por las víctimas? “Con toda evidencia en el cristianismo. El humanismo y el humanitarismo inician su desarrollo entierra cristiana.”
Sin embargo, al afirmar lo dicho, nos acercamos a terreno farragoso. Un terreno en el que tanto el tema del perdón como el de la culpa juegan una partida profundamente controvertida y peliaguda, al mismo tiempo que intensa, con tintes de inmanencia y de trascendencia.
El más anticristiano de los filósofos del s. XIX, Nietzsche, identificó así la fuente de nuestra culpabilidad(una de las razones por las que el cristianismo sigue siendo hoy el mejor chivo expiatorio). Para Nietzsche el cristianismo es el responsable de hacernos cargar con una culpa innecesaria. Hasta tal punto quiso fundamentar esta idea que llegó a afirmar lo siguiente: “So pena de degenerar, las sociedades tienen que librarse de los desechos humanos que les estorban”. Justificando así el exterminio...