El problema medioambiental: Nuestras nuevas responsabilidades

El Problema Medioambiental: Nuestras nuevas Responsabilidades

Las actividades que las personas llevamos a cabo para satisfacer nuestras
necesidades son absolutamente fundamentales y prioritarias, pero también hay
que entender que dependen o están en relación directa con la naturaleza. Esa
dependencia se da no sólo porque toda la existencia humana se realiza en un
paisaje natural ybiológico, sino también porque nuestras necesidades, para ser
satisfechas, exigen consumir los productos de ese paisaje. Desde hace cierto
tiempo, varios sectores de distintos orígenes (políticos, artistas, expertos
medioambientales, etc.) han notado la antinomia que surge entre la vida humana y
la preservación armónica del medio ambiente, cuando se analiza a la luz de las
características particularesde nuestro consumo que dista mucho de responder
simplemente a una cuestión de supervivencia. Estos grupos han provocado un
verdadero movimiento mundial de grandes proporciones que reclama la
conciliación de nuestras necesidades con el respeto por el medio ambiente y que
demanda una toma de conciencia acerca de las generaciones futuras. Mi trabajo
versará sobre el origen de esta cuestiónproblemática, el conflicto real entre
desarrollo -entendido este de la manera en la que hoy se entiende- y medio
ambiente, y la importancia de una actuación responsable y colectiva que nos
permita subsanar los riesgos o, por lo menos, aminorarlos un poco en
consideración a la subsistencia del género humano sin comprometer al desarrollo.

Acabo de referirme al carácter particular que tiene elconsumo humano ¿Cómo se
entiende eso? No hace falta mucho conocimiento para darse cuenta de que los
animales no racionales consumen en función de lo que necesitan para sobrevivir
y, en cambio, los seres humanos consumimos una infinidad de cosas que no
necesitamos esencialmente. La forma en que, predominantemente, se ha
planteado la economía en los últimos años (aperturas económicas y estadosmínimos y poco participativos), propicia este consumo exagerado que resulta
bastante conveniente para muchos grupos empresariales y políticos. Al respecto,
Rayen Quiroga, del Instituto de Ecología Política de Chile, opina:

“Resulta innegable que la apertura comercial y financiera que impulsa la doctrina
neoliberal, provoca un incremento de la actividad económica (…) Este argumento
sustenta elentusiasmo de gobiernos y empresarios por la apertura y
desregularización de la economía”
Un punto de partida para este análisis es, entonces, reconocer que hoy en día
existe un consumo mucho mayor que en años anteriores y que la economía
neoliberal ha tenido un papel decisivo en ello. El crecimiento económico y el muy
citado y controvertido concepto de “desarrollo” han sido formas dejustificar este
cambio y, por consiguiente, de justificar también todo lo que el cambio conlleva.
Pero relacionemos lo anterior con nuestro tema. La misma autora recién citada
expresa más adelante:
“Es obvio que el incremento de la producción de bienes y servicios, así como del
consumo y la distribución, generará a su vez incrementos proporcionales en la
producción de desechos, subproductos,emisiones, desperdicios, etc; que
afectarán necesariamente al ecosistema que sostiene la vida y las actividades
humanas”.1
Tenemos, entonces, que la economía se ha cruzado problemáticamente con la
ecología, en el momento en el que la producción de bienes comenzó a
acrecentarse, aumentando también el consumo y todos los procesos relacionados
a ello.

¿Por qué esto es un problema?
Desde mi puntode vista, tanto el consumo como los procesos a gran escala
asociados a él (que, como dijimos, se han incrementado excesivamente en los
últimos años) tienen el gravísimo problema de moverse exclusivamente en una
dimensión actual y sin mirar hacia el futuro.
Los científicos se han dado cuenta de los enormes riesgos que la nueva sociedad
industrializada representa para el medio ambiente y,...