El Sapito Que No Queria Serlo

Páginas: 14 (3283 palabras) Publicado: 23 de mayo de 2015
El sapito que no queria serlo…
En la charca donde vivía no tenía nada que hacer, solo estar croando día y noche. Así pasaba todos los días aquel sapito, triste, desolado, solo. Lo habían dejado sus familiares, porque no podía saltar.
-“Ya no quiero ser sapo”- se decía.
Pero nada le podía conceder ese deseo, ya que así había nacido y así seguiría hasta el fin de su existencia.
Un día, paseandopor ahí andaba una cigarra, la cuál al verlo muy triste le llamó la atención y se acercó a él.
-“¿Qué te pasa sapito?”
-“Estoy muy triste, no tengo nada que hacer, ni a quien importarle”. Contestó el sapito.
-“Pero, ¿por qué dices eso? Mira, date cuenta, a tu alrededor todos disfrutan de tu canto, sin ti, este lugar se sentiría solo, porque eres el único de tu especie que anda por aquí.
-Es verdad-dijo un conejo que andaba cerca bebiendo agua del charco. –
A mi me encanta tu sonido, porque le das música al bosque.
-A mi también- dijo una serpiente. –Normalmente me como a los sapos y a las ranas, pero tu me inspiras mucha paz, me encanta lo que haces, por eso nunca he intentado comerte.
– Eres maravilloso sapito- dijo un gorrión que estaba parado en un árbol. – me encanta como cantas.
–¿Ves? – dijo la cigarra – todos te quieren, lo que pasa es que no te lo habían dicho para no interrumpir en tu canto. Pero para todos eres importante.
-Muchas gracias a todos, por esto, me hacen sentir muy feliz, pensé que a nadie le importaba pero a partir de este momento les cantaré gustoso.
A veces nos sentimos tan solos, que pensamos que nadie nos quiere, pero hay muchos alrededor que nos aman,solo que en ocasiones necesitamos saberlo.
FIN
Escrito por: Cuauhtémoc de Jesús Domínguez Soto.



Biografigrafia
Poeta y médico puertorriqueño, nacido en Añasco en 1843 y fallecido en 1898. Muy influido por los poetas parnasianistas franceses que alentaron una estética premodernista europea en las últimas décadas del siglo XX, está considerado como el gran iniciador y difusor del movimientomodernista en las Letras puertorriqueñas.


El Barril de Amontillado
      Lo mejor que pude había soportado las mil injurias de Fortunato. Pero cuando llegó el insulto, juré vengarme. Vosotros, que conocéis tan bien la naturaleza de mi carácter, no llegaréis a suponer, no obstante, que pronunciara la menor palabra con respecto a mi propósito. A la larga, yo sería vengado. Este era ya un punto establecidodefinitivamente. Pero la misma decisión con que lo había resuelto excluía toda idea de peligro por mi parte. No solamente tenía que castigar, sino castigar impunemente. Una injuria queda sin reparar cuando su justo castigo perjudica al vengador. Igualmente queda sin reparación cuando ésta deja de dar a entender a quien le ha agraviado que es él quien se venga.
      Es preciso entender bien queni de palabra, ni de obra, di a Fortunato motivo para que sospechara de mi buena voluntad hacia él. Continué, como de costumbre, sonriendo en su presencia, y él no podía advertir que mi sonrisa, entonces, tenía como origen en mí la de arrebatarle la vida.
      Aquel Fortunato tenía un punto débil, aunque, en otros aspectos, era un hombre digno de toda consideración, y aun de ser temido. Seenorgullecía siempre de ser un entendido en vinos. Pocos italianos tienen el verdadero talento de los catadores. En la mayoría, su entusiasmo se adapta con frecuencia a lo que el tiempo y la ocasión requieren, con objeto de dedicarse a engañar a los millionaires ingleses y austríacos. En pintura y piedras preciosas, Fortunato, como todos sus compatriotas, era un verdadero charlatán; pero en cuanto avinos añejos, era sincero. Con respecto a esto, yo no difería extraordinariamente de él. También yo era muy experto en lo que se refiere a vinos italianos, y siempre que se me presentaba ocasión compraba gran cantidad de estos.
      Una tarde, casi al anochecer, en plena locura del Carnaval, encontré a mi amigo. Me acogió con excesiva cordialidad, porque había bebido mucho. El buen hombre estaba...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Se Querian
  • No quería
  • SAPITOS SUMADORES
  • El serle de lesrevolucions
  • Un héroe sin serlo
  • sapito aventurero
  • Sapito Rayado
  • Cuento el sapito

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS