El Uso De Drogas Compilaci N De EGW Por Olga
EL USO DE DROGAS
EN EL CUIDADO
DE LOS ENFERMOS
Una compilación de los escritos de
Elena G. de White
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EL USO DE DROGAS
EN EL CUIDADO
DE LOS ENFERMOS
Una compilación de los escritos de
Elena G. de White
“Después de haber visto tanto daño causado por la administración de drogas, no
puedo utilizarlas, y no puedo testificar en su favor. Debo ser fiel a los conocimientos
que Dios me ha dado” (
Mensajes selectos
, t. 2 p. 336).
Capítulo 1
LAS DROGAS Y SU USO
La visión del 6 de junio de 1863
“La ingestión de drogas ha producido más muertes que todas las demás causas
combinadas. Si hubiera en el país un médico en lugar de miles de ellos, se evitaría
una gran cantidad de muertes prematuras. Una multitud de médicos y de drogas han
maldecido a los habitantes del mundo, y han llevado a miles y a decenas de miles
prematuramente a la tumba”
“El comer con demasiada frecuencia y en mucha cantidad recarga los órganos
digestivos y afiebra el organismo. La sangre se torna impura y luego ocurren diversas
enfermedades. Se envía a buscar al médico, quien prescribe alguna droga que
proporciona un alivio momentáneo, pero que no cura la enfermedad. Puede cambiar
la forma de la afección, pero el verdadero mal aumenta diez veces en intensidad. La
naturaleza estaba haciendo lo mejor posible por librar al organismo de una cantidad de impurezas que se habían acumulado, y si se la hubiese dejado librada a sí misma, y
se la hubiese ayudado con las bendiciones sencillas provistas por el cielo, tales como
el aire puro y el agua limpia, se habría producido una curación rápida y segura.
“Las personas aquejadas por la enfermedad pueden hacer por ellas mismas lo que
otros no pueden hacer. Deberían comenzar por aliviar la naturaleza de la carga que le han impuesto. Deberían suprimir la causa. Deberían ayunar durante un corto tiempo y
dar al estómago la oportunidad de descansar. Deberían reducir el estado febril del
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organismo mediante la cuidadosa y bien realizada aplicación de agua. Estos esfuerzos
ayudarán a la naturaleza en su lucha por librar al organismo de impurezas. Pero
generalmente las personas que sufren de dolor se tornan impacientes. No están dispuestas a ser abnegadas y a sufrir un poco a causa del hambre. Tampoco están
dispuestas a esperar el lento proceso de la naturaleza que se lleva a cabo para
reconstituir las recargadas energías del organismo. Pero están decididas a obtener
alivio de inmediato, de modo que ingieren drogas poderosas prescriptas por los
médicos. La naturaleza estaba haciendo bien su trabajo, y habría triunfado, pero
mientras cumplía su tarea se introdujo en ella una sustancia de naturaleza venenosa.
¡Qué error! Ahora la naturaleza que se ha sometido a abusos tiene que combatir dos
males en lugar de uno. Abandona la tarea en que estaba empeñada y se dedica
resueltamente a expulsar al intruso que acaba de introducirse en el organismo. La
naturaleza siente esta doble carga que pesa sobre sus recursos, y se debilita.
“Las drogas nunca curan la enfermedad. Únicamente cambian su forma y su
localización. Sólo la naturaleza es el restaurador eficaz, y podría llevar a cabo su
tarea en forma mucho mejor si se la dejara librada a sí misma. Pero pocas veces se le concede este privilegio. Si la naturaleza estropeada soporta la carga y finalmente
cumple en gran medida la doble tarea, y el paciente vive, el médico es el que recibe el
crédito. Pero si la naturaleza fracasa en su esfuerzo por expulsar el veneno del
organismo, y si el paciente muere, se dice que eso se debe a las inescrutables ...
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