Entre Libros y Viñedos Relato Adeleón 2 012

Entre Libros y Viñedos – Relato.
Código de Registro: 1206281883045
Fecha: 28-jun-2012 20:37 UTC
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Julio Alejandro de León Galindo
Guatemala 06/08/1989.
Escritor, Poeta.
A-1 1278951

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-Entre Libros y ViñedosA una temprana edad en donde iniciaba a encontrar el significado
de la vida, yo vivía en un pequeño pueblollamado Villa
Esperanza; entre sus colinas solía haber un viñedo vistoso y muy
hermoso en el cual los dueños y empleados se dedicaban a la
viticultura, a la recolecta de uvas y a la preparación de vinos de
la mejor calidad ya hacia mucho tiempo. El pequeño viñedo
exportaba a la gran ciudad solo sus mejores vinos, producto de
la mejor cosecha de uvas. Contaban con gran variedad de vinos
producidospor

los

propietarios

del

viñedo;

esta

pequeña

industria hacia muy vistosa a la pequeña villa. A los dueños del
viñedo les fue aumentando por año las ganancias, pero su mayor
producción consistía de las botellas de vino. Contaban con una
alta gama de botellas a las cuales habían colocado nombres
singulares y cada una de ellas muy especial en su aroma y sabor;
pero había una botella enespecial

“La Paix Ivre” esta clase de

vino los había convertido en una empresa productiva y a su ves
los propietarios se hicieron de mucho dinero convirtiéndose en
gente de alcurnia y sofisticada; Se marcharon del lugar lo antes
posible y así mismo la empresa de vinos dejando en Villa
Esperanza sus fincas y hectáreas así como la vieja bodega de
vinos ya producidos a cargo de un noble y moribundoseñor
llamado Joseph Vides. El era el empleado más antiguo del viñedo,
los propietarios le tenían cierto cariño por su persistencia con
ellos, al marcharse

del valle, convirtieron la bodega en guarida de botellas de vino
para añejar; encargaron el viñedo al señor Joseph Vides junto
con la bodega de vinos. El se havia convertido en el guardián de
la misma, la cual almacenaba una única clase de vinoque
producía la compañía
muy

adulto

tenia

“La Paix Ivre” El señor Joseph ya era
una

vida

de

experiencias

para

contar,

lastimosamente nadie le prestaba el tiempo ni oídos para
escuchar sus hazañas, en ocasiones yo lo hice, le escuche muchas
veces aunque al inicio tan solo por el hecho que el destapaba
una botella de vino con cada visita que yo le hacia. Tenía un
gusto peculiar por la lecturael vetusto señor, además de una
voz muy agradable, era un masaje a los oídos escucharle entonar
el habla, con el tiempo la amistad creció así como mis gustos
por la juerga, las mujeres y el trasnochar, en cada tertulia o
velada celebrada con mis amistades el licor y los excesos se
hacían de mayor solicitud, lastimosamente éramos muy jóvenes
para cargar tanto dinero y aun mas el poder conseguirlolegalmente. Un día robe un viejo libro de la biblioteca de mi
padre, un libro sin mayor importancia, su nombre era “La
tregua” de un fulano llamado -Mario Benedetti-.
Lo escondí bajo mi sacota y Salí como león hambriento tras una
gacela de mi hogar, corrí hacia la vieja bodega de la villa, le
gritaba al anciano acercándome por la colina “Viejo Joseph”
“Viejo Joseph” y el sonreía al ver que levisitaba. Llegue agitado
hacia los pies de su vieja silla de mecer y el sobo mi frente,
saque con entusiasmo el regalo que había hurtado y se lo
entregue en sus manos, al ver el libro su rostro formo un gesto

de felicidad, como si yo hubiera sabido que ese era el libro
perfecto para sus largas noche de vigilia, me agradeció y destapo
una botella de vino, me sirvió una copa, en ese momento pensé
en unplan que seria ideal para ambos, un plan que solo una
mente picaresca y retorcida podía maquinar, le propondría hacer
un cambio de libros por botellas de vino. Entre platicas y sorbos
de vino le deje saber mi plan, al momento callo y seño las cejas,
luego medito en todas esas largas horas de soledad acompañadas
de un habano y un buen libro, no se pudo resistir a aceptarlo;
brindamos por...