Entrrevista a miguel de la madrid

Miguel de la Madrid Hurtado: Como un momento muy importante. En ese año se dio
una lucha pluripartidista como no la habíamos observado. Salinas ganó por una fracción
mínima de arriba de 50 por ciento, Cuauhtémoc Cárdenas obtuvo una votación de 33
por ciento y eso le permitió afianzarse como un personaje político destacado.
CAF: Queda el fantasma del fraude electoral. Veinte años después,¿cómo se defiende
de eso?
MMH: En 1988, yo digo que no hubo fraude. Una de las pruebas es que en las
elecciones de 1991 el PRI volvió a ganar por mayoría absoluta.
CAF: ¿Una cosa prueba la otra?
MMH: Por lo menos está relacionada.
CAF: Me gustaría conocer su reflexión, sus recuerdos, sobre la famosísima caída del
sistema.
MMH: Las elecciones de 1988 tuvieron características extraordinarias enrelación con el
pasado. La Secretaría de Gobernación, en un exceso, señaló que iba a dar a conocer los
resultados el mismo día de las elecciones, a las 12 de la noche. Bueno, después se daría
cuenta que el conteo de los votos a las 11 de la noche no estaba cumplido y, por lo
apretada de la elección, a esa hora no estaba claro quién había ganado; tan es así que
Carlos Salinas no quería proclamarsu triunfo. Se esperó hasta que hubiera ya un conteo
sustancial como a las tres de la mañana, cuando ya los resultados fueron mayoritarios.
CAF: ¿Usted le llamó para que se pronunciara antes de esa hora?
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MMH: Sí.
CAF: ¿Y qué le dijo?
MMH: Pues que él prefería esperarse.
CAF: ¿Y usted qué pensaba?
MMH: Que era un error. La tradición había sido que una vez tenida la información
básica seproclamara el triunfo. El hecho de que no se proclamara el triunfo a las 11 de
la noche dio motivos para que la gente dudara de los resultados.
CAF: ¿Qué fue exactamente la caída del sistema?
MMH: Técnicamente, la expresión es incorrecta porque no se cayó el sistema, sino que
no se computó la mayoría que se había prometido.
CAF: ¿Por qué razón?
MMH: Pues porque no había llegado.
CAF: En lacharla que tuvimos para este mismo proyecto, Cuauhtémoc Cárdenas dijo
que hubo una petición expresa de evitar la incorporación de los llamados “agregados”
en la información de los resultados.
MMH: No, lo que hubo fue la decisión de no dar a conocer los resultados a las 11 de la
noche, porque se hubieran prestado a mayores dudas por parte de la población.
CAF: Los primeros que recibían ledaban el triunfo a Cuauhtémoc.
MMH: Sí. Sobre todo en algunos estados.
CAF: ¿En el Distrito Federal?
MMH: Sí.
CAF: ¿Qué pasó por su mente?
MMH: Me preocupé mucho. De saberse que él iba adelante, se iba a poner en duda toda
la elección.
CAF: ¿Tenía que ganar Carlos Salinas a fuerza, o cabía en su mente la posibilidad de
que ganara Cárdenas?
MMH: No, yo creía de buena fe que el que iba a ganarera Salinas, como sucedió.
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CAF: ¿Pero cabía en su mente la posibilidad de que ganara Cuauhtémoc? No que
usted lo quisiera, sino que pudiera ocurrir.
MMH: Nunca lo pensé.
CAF: No cabía en la mente de un presidente priísta de aquellos años.
MMH: No, era real.
CAF: ¿Y por qué no contemplaba esa posibilidad?
MMH: La costumbre, la tradición… Simplemente pensaba que no podía ser.
CAF: ¿Usóalguna vez la expresión “fraude patriótico”?
MMH: No. De ninguna manera.
CAF: Cuauhtémoc Cárdenas nos dijo que 15 años después se enteró de buena fuente
que había artillería lista en Palacio Nacional.
MMH: No, no es cierto. Sólo estaba lo normal, la guardia presidencial que está en
Palacio.
CAF: No hubo ninguna instrucción de su parte ni al Ejército ni a la policía.
MMH: No.
CAF: ¿Qué buenafuente le habrá dicho a Cuauhtémoc que sí había tal cosa?
MMH: Algún amigo suyo.
CAF: Pero usted lo niega categóricamente.
MMH: Así es.
CAF: A Cuauhtémoc se le cuestiona si debió haber seguido adelante y le reclaman por
frenar la movilización. Había temor a un baño de sangre. ¿Pudo haber ocurrido algo
así?
MMH: Sí, por alguna imprudencia.
CAF: ¿Qué hubiera sido una imprudencia?...