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¿Cómo sobrevivir?

En un lugar apartado, de un humilde barrio de Las Palmas de Gran Canaria, observamos como la familia Pérez despierta al amanecer de un nuevo día. El primero en levantarse y dirigirse a la cocina es el padre de familia llamado Mateo:
-Mateo: ¡Mierda! ¿Dónde está el café?

Su esposa que acababa de salir del baño intervino.

-Eva: ¡Se nos acabó ayer! De hecho te lo dijeanoche, al igual que faltaba también cereales y pan de molde.
-Mateo: Me conformaré entonces con una taza de leche y algo de pan viejo.
-Eva: Veremos a ver que le puedo preparar a tu hijo. ¿Puedes mirar si queda algo de Cola cao?
-Mateo: Ya miré antes y no queda, si tengo tiempo hoy me pasaré por el supermercado a comprar. Lo único que pasa es que no sé si tendremos suficiente para hacer unacompra decente por el momento.
-Eva: Coge algo de los ahorros que tenemos guardados en el armario de nuestra habitación. Creo que con treinta euros por ahora será suficiente, a ver si con un poco de suerte podemos contar con más dinero. Por cierto, ¿a qué hora tienes la entrevista de trabajo?
-Mateo: La tengo a las nueve de la mañana, pero tendré que salir mucho antes porque la guagua pasa cadamedia hora y además hay mucho tráfico.

Una vez dicho esto, Mateo que ya ha terminado de preparar la taza, se sienta junto a la mesa de la cocina a esperar a que el dormilón de su hijo sea despertado por su madre.
-Eva: ¡Marcos! ¡Despierta gandul que se te hace tarde!

Su hijo se revolvió de forma perezosa en la cama y le dijo:

-Marcos: ¡Hoy no hay clase mamá!
-Eva: Claro que sí, que esViernes, que no soy tan mayor.

Su hijo no tuvo más remedio que levantarse e ir directamente al baño. Después de varios minutos, Marcos se dirige a su habitación. Allí le espera la ropa que su madre le ha preparado para ir al colegio.

-Marcos: ¡Otra vez la misma ropa! ¿Qué me dices a esto mamá?
-Eva: Lo siento carió, pero la otra ropa está en la lavadora.
-Marcos: Si tuviera más cantidad deropa no tendría ningún problema.
-Eva: Se cómo te sientes hijo mío, pero ya hemos hablado de esto antes y sabes que no estamos pasando por un buen momento económico.

El hijo se pone la ropa y se dirige con rapidez a la cocina a desayunar. Una vez allí, observa con extrañeza su desayuno, que consiste en un vaso de leche y medio pan viejo.

-Marcos: ¿Dónde están los cereales? ¿Y el Cola cao?Su padre que estaba sentado enfrente de él, le observa con tristeza y al cabo de unos segundos y tras coger un poco de aire le contesta:
-Mateo: Se acabó ayer Marcos. Si me da tiempo lo iré a comprar después. Y ahora quiero que mantengas la boca cerrada y te des prisa para no perder la guagua.

En ese momento, su mujer se dispuso también a desayunar, no sin antes observar con pena el desayunode su hijo. A los pocos minutos Mateo se levanta de la silla, coge la chaqueta y se dispone a salir, pero antes su mujer le detiene con la mirada.

-Eva: ¿No dices nada?

Entonces, Mateo le da un gran abrazo a su mujer y un beso a su hijo.

-Mateo: Espero que salgan bien las cosas y consiga el trabajo, pero no depende exclusivamente de mí.
-Eva: No te preocupes, que después de lo que hemospasado, por fin tendrá que llegar tu oportunidad.
-Marcos: Suerte papá, y no te olvides del Cola cao.

Todos se rieron y finalmente se marchó. Al cabo de diez minutos, Eva y Marcos se pusieron de camino al colegio. Durante el camino, se toparon con una situación desagradable. Enfrente de la puerta de la Iglesia de su barrio se encontraba una niña de la edad similar a la de Marcos, pidiendodinero con una cesta a sus pies.

-Marcos: Mamá, ¿por qué esa niña está pidiendo dinero?

Su madre no le contestó, apretó más fuerte la mano de su hijo y siguió al frente. Sin embargo, su hijo acertó ver una lágrima.
Eran las ocho y veinticinco cuando llegaron al colegio, la entrada estaba llena de padres y alumnos. Eva, se fijó en que solo había dos profesores para atender la avalancha de...