era K

Pacho O’Donell y Norberto Galasso analizan pasado y presente del peronismo. ¿El kirchnerismo es una continuidad o una ruptura? Las diferencias y los puntos en común de una doctrina
Frente a la disyuntiva que plantea comprender los tiempos que corren, siempre es bueno echar mano a la historia. Hoy el país se encuentra a sí mismo desempolvando los viejos debates políticos, mientras piensa suactualidad. Así, tal vez algunas de las nuevas preguntas puedan hallar respuestas concretas entre quienes más han pensado el pasado y el presente de la Argentina.

Pacho O’Donell y Norberto Galasso, dos destacados historiadores y ensayistas, muy vinculados al pensamiento nacional, se em-barcan en la aventura junto a La Tecla.

-¿Por qué todos los partidos, independientemente de la ideología a laque adscriban, buscan su “pata peronista”?

Pacho O’Donell: -Tanto Perón como Irigoyen organizaron sus partidos desde el poder, cosa que no pudieron hacer otras fuerzas que aparecieron fulgurantemente y luego se agotaron, como el Frepaso, el PI, Fuerza Nueva y esto de la doctora Carrió, que no tienen la capacidad de organizarse nacionalmente, lo cual, a la larga o a la corta, constituye su actade defunción. Una alianza con el peronismo o con el ra-dicalismo significa poder acceder a una organización nacional. Esto quiere decir, entre otras cosas, tener fiscales en todas las mesas. Sin esto no podés presentarte a elecciones.

Norberto Galasso: -Lo que ocurre es que el peronismo tiene una historia. Nace como expresión de las mayorías populares del campo de trabajo, y en determinadomomento, a partir del ‘55, se intenta bo-rrarlo; se lo proscribe por 18 años y cuando vuelven a abrirse las compuertas electorales sigue con fuerza suficiente para imponerse. Esto hace que algunos políticos traten de recostarse sobre los sectores populares, que no han hecho su experiencia en la Argentina en los partidos de iz-quierda, sino al lado del peronismo.

-¿Dónde está el piso de adhesionesdel peronismo actualmente?

O’D: -Kirchner es un presidente muy peronista. Su gobierno se parece mucho a los primeros gobiernos de Perón: tiene un sesgo muy confrontativo, con rasgos autoritariosl; con medidas muy claramente po-pulistas: fuerte vocación de redistribución del ingreso, privilegiadamente a favor de los sectores populares; y enfrentamientos que reproducen bastante bien los que tuvoPerón: con la Iglesia, con la oligarquía, con un sector de las Fuerzas Armadas. Incluso la oposición es muy parecida a la que tuvo Perón durante su primer gobierno.

G: -El peronismo sufre a través de la po-lítica de Menem, 1989 a 1999, una especie de vaciamiento, en el cual la cúpula abandona las banderas fundamentales de la justicia social, la independencia económica y la soberanía política.Uno pudo pensar en aquel momento que el peronismo iba perdiendo sus bases, a punto tal que a Menem lo votaba mucha gente de Barrio Norte. Desde 2003 se produce un fenómeno bastante peculiar: desde el mismo peronismo, desde un sector, aparece, a través de Kirchner, un recupero de esas banderas. No creo que haya duda de que la mayor parte de los sindicatos y movimientos sociales están apoyando alGobierno, junto a sectores de clase media popular.
Se evidencia, además, una especie de contracara: a medida que el peronismo avanza y se consolida, aparece también una reacción antiperonista bastante fuerte, un gorilismo, diríamos, que se expresa en algunos sectores que no son sólo de la clase alta, como la Sociedad Rural, sino algunos de clase media.

-¿Hay puntos de encuentro entre elkirchnerismo y el primer peronismo?

O’D: -Hay una actualización. Es uno de los méritos de Kirchner, más allá de todos sus defectos: ha generado políticos. En la Argentina se vuelve a discutir política en las casas, en los clubes, en los bares; se discute política, y airadamente, con unos a fa-vor y otros en contra, y me parece positivo. Me gusta esta democracia alborotada, donde los conflictos se...