ESPOCENDRA

ufeffExcesiva adjetivación
adjetivación lo que mejor revela la temperatura cordial, afectiva de un texto y de un estilo
, las llamadas a los sentidos todos
espronceda gusta tanto de ellos quemuchas veces se complace en servirse de dos para encuadrar un sustantivo4:



La amarillenta mano descarnada;



En ocasiones los adjetivos se amontonan alrededor de un mismo sustantivo:



Ladulce, bella, celestial Florinda;


Y en muchos casos no son versos aislados los que se caracterizan por la densa adjetivación, sino estrofas completas. Véanse estas dos deEl estudiante deSalamanca:



Sublime y oscuro,



Rumor prodigioso,



Sordo acento lúgubre,



Eco sepulcral,



Músicas lejanas,



De enlutado parche



Redoble monótono,



Cercanohuracán,



Tan excesiva adjetivación se prestaba a la parodia,
fácil observar cómo, muchas veces, Espronceda usa adjetivos, no porque sean necesarios, sino porque son eufónicos(armonioso). De ahí supredilección por los adjetivos esdrújulos: Cárdeno, mísero, lóbrego, fúnebre, bárbaras, lívido, pálido, hórridas, lánguida, árido, rápido, trémula, cándida, plácido, fúlgido, vívido, bélico, gótico,mística, etc.
Espronceda procura extraer toda la sonoridad posible al verso, logrando efectos onomatopéyicos tan hábiles como el del último verso citado, o tan delicadamente musicales -sosiego,dulcedumbre
más que calificar o determinar a los sustantivos que acompañan, les sirven de marcos fastuosos. Y sucede que, en muchos casos, la importancia se desplaza de lo apresado en tales marcos a éstosmismos. Con una valoración sentimental y sensorial, a la vez, de los hechos y de los seres, Espronceda presta más atención al color, luces y sonidos que los rodean que a ellos mismos.
En este deleitepor lo sensorial Espronceda está cerca -aun cuando en otro plano- de nuestros poetas del XVII, sus modelos para la adjetivación, según Graves Baxter.
El que, para el autor del Diablo Mundo, los...