ESTADO IDEAL

EL ESTADO IDEAL
(ENSAYO)

En un lugar sin nombre de la geografía colombiana, alejado de toda particular muestra de infinita equidad e imparcial justicia, pero bien cerca de toda necesidad mundana; floreció, más por disposición del azar, que cualquier otra intención, una familia, sin mayor riqueza que el tener para contemplar el infinito horizonte, que en su vacio, solo le quedaba el dichosoamanecer y el angustioso ocaso, lleno de inquietudes cada día. La familia Sombra, estaba compuesta de seis miembros, dos hijos varones, Mario de 19 años, quien se hallaba prestando el servicio militar a la patria y Álvaro de 17 años de edad quien se dedicaba a las labores del campo, porque estudiar nunca fue su pasión, dos mujeres, Mariela de 15 años, quien vivía con su marido en la misma casa de suspadres, pues él no tenía los medios para vivir solos y Rosita de 13 años de edad, quien no era muy asidua en el aula de clases debido a sus responsabilidades familiares, Martina la esposa de 35 años, aunque parecía 10 años más, rendida a los quehaceres del hogar y Moisés que a juicio se veía de casi medio siglo, era el señor de la casa, un hombre gris, con hombros anchos y pecho generoso, frenteamplia y rugosa, curtido por el sol, de risa desinteresada, manos generosas hechas para el arrullo y el azadón, con la mirada puesta en el ocaso, esperando no se qué, que lo saque de la postrera abstracción diaria.

Un día no como todos los demás, era domingo, me halle en el mercado con el señor Moisés y su familia, quienes eran convencidos de que lo único que les pertenecía por derecho divinoera la palabra solemne dicha para alimentar las almas abatidas y desmoralizadas y guiar en toda una semana de peregrinación mundana los más ínfimos anhelos de cada corazón.
Lo aborde como al incondicional amigo que encarna, y me saludó con voz franca y gesto afable, le dije que estaba encantada de verlo, pues hacia mucho no lo veía, me respondió, que como no salía del monte como los animales, quepara que salía, sino había nada para él en el pueblo, que le mejorara su situación. Le conteste, no diga eso, usted no debe vivir alejado de las demás personas, debe compartir con más entrega y generosidad, y me respondió, a compartir qué? Problemas y desdichas? Si vivo cerca de los demás y comparto como dice usted, en qué me va a cambiar la vida? le dije, es necesario compartir los problemasporque en ello encontrarán entre todos las soluciones, usted debe comportarse como un ser social, pues no está bien para su familia y la comunidad en general estar alejados de los demás, porque sería más fácil encontrar soluciones, pues todos dependemos de todos es propio de la vida del hombre, por demás que de la diferencia y la adversidad tratadas con generosidad surge el bien común . Comentó, estees un mal ya muy viejo, no lo va a solucionar ni la gente, ni el Alcalde, ni el Gobernador, ni el Presidente, pues cada uno se ocupa de lo suyo y aparecen solo para las campañas políticas y uno ya no sabe a quién escoger, todos son iguales, ofrecen mucho y cumplen casi nada y los problemas siguen peor que al principio, eso le da resultado pero a ellos, y uno que es pobre y jodido, ya no tieneesperanzas que esto se arregle. Bien, la conversación seguía, con más desacuerdos que convenios.

Entonces le pregunte, don Moisés y usted de ¿Cuáles males es que me habla? ¿Qué es lo que le gustaría que le solucionen? ¿Qué es lo que usted espera de los gobernantes?, proseguimos y me dice: pues mija, esto hay de todo y para todos; el que no es corrupto es inepto políticamente hablando, mientras unode campesino padece grandes trabajos, los políticos de turno le jalan al saqueo y la destrucción de la viña que otros han dejado, pueblos enteros azotados por el flagelo del desorden público, administrativo, hambre, desempleo, raponazo, desplazamiento forzado, malos servicios públicos, muchos queriendo quedarse con el poder, para jodernos más, esto es la tiranía.
Por eso don Moisés, le insisto...