federer
Murray tenía ventaja de 11-9 en el cara a cara con Federer y le había derrotado en tres delos últimos cuatro enfrentamientos, el ya penúltimo en las semifinales de este torneo, hace un año. Entonces, Federer aún no había caído en su rendimientocomo iba a hacer a lo largo del pasado curso, ofreciendo indicios de su declinar.
A sus 32 años, está claro que el sexto cabeza de serie de la presenteedición aún persigue tallar en mayor relieve su leyenda y añadir algún 'grande' a los 17 que colecciona. Viéndole así, en victorias como las logradas ante Tsongay Murray, hay motivos sobrados para creer en él. Murray, aún falto de ritmo tras estar cuatro meses de baja debido a una operación en la espalda, fue arebufo de su adversario, espoleado por su excelente porcentaje de primeros servicios, hasta que aprovechó sus dos primeras opciones de 'break' e igualó a cincoen el tercer set. Entre las numerosas puertas que abrió Federer para abreviar la confrontación, estuvo también contar con su saque para cerrarlo en tres sets.Hubo de esperar hasta el 'break' en el octavo juego del cuarto set y el tercer 'match point' en el posterior 'game' para terminar con un saque directo.
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